La Audiencia de Granada pidió hace siete meses una auditoría de las pulseras antimaltrato
Actas de la comisión de Violencia de Género alertan de la necesidad de evaluar los dispositivos por los fallos, la «ansiedad e inseguridad» que genera en algunas víctimas, que pedían la retirada
Las actas de la Comisión de Violencia de Género de la Audiencia Provincial, remitidas al observatorio del Consejo General del Poder Judicial y a su ... vez a la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género, que depende del Ministerio de Igualdad, ponen de manifiesto que desde julio de 2024 se advertían fallos en las pulseras antimaltratadores . En febrero de este 2025, las incidencias en el sistema de localización persistían y, nuevamente, la comisión, formada por administraciones, operadores judiciales, autoridades y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado volvían a exponer la problemática con preocupación, advirtiendo incluso de que algunas víctimas habían solicitado la retirada del dispositivo por miedo e inseguridad.
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Los operadores pedían una auditoria de Cometa, la empresa encargada de los brazaletes. Los intervinientes concluían que los dispositivos de la nueva empresa adjudicataria (Cometa) están funcionando «mucho peor», solicitaban que evaluara el servicio, «ya que es una herramienta que en teoría debe servir para proteger a las víctimas, pero se está constatando que personas (agresores e investigados) cuentan con habilidad para modificarlos». Por su parte, la fiscalía proponía abrir diligencias de investigación sobre los fallos y elevar el informe a Fiscalía General.
En el acta consultada por este medio, se indica por parte de la Guardia Civil que, debido a las disfunciones en el funcionamiento técnico del dispositivo Cometa y la gestión de las incidencias por parte del centro de control, «existe un número de víctimas que se sienten desprotegidas, comunicando de manera reiterada y manifiesta el perjuicio que le está suponiendo la asignación de dicho dispositivo, y planteándose renunciar a esa medida de protección, llegando alguna víctima a entregar su dispositivo en sede judicial».
Las magistradas de los Juzgados de Violencia sobre la Mujer Granada indicaron que se pone de manifiesto que el sistema de control de dispositivos falla, como ya se ha puesto de relieve en anteriores reuniones, y esto crea, «por un lado, una situación de ansiedad e inseguridad en las víctimas, y, por otro, un grave problema de prueba en la tramitación de los procedimientos por quebrantamiento». «A lo que se une que se está acordando la imposición de muchísimos dispositivos, por lo que dichos problemas se están produciendo en multitud de causas penales». Los informes de Cometa tienen presunción de veracidad y si en consta que el agresor o investigado estaba lejos de donde la víctima afirma que estaba, «tiene mucho peso probatorio» y se debe respetar el principio de presunción de inocencia. Tal y como adelantó este periódico, los juzgados reseñan que el problema de los citados informes es que, en ocasiones, el agresor está junto a un agente de la Policía o de la Guardia Civil y el informe de Cometa indica que la ubicación es incluso otra distinta. Las víctimas llegaron a decir que preferían no tener el dispositivo, porque Cometa iba a favorecer al agresor.
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