La Junta paraliza la tramitación de la línea de alta tensión del Valle de Lecrín
Medio Ambiente declara la «caducidad» del proceso porque pidió documentos «necesarios» que la empresa todavía «no ha enviado»
La delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía en Granada ha emitido un informe que suspende la tramitación de la polémica línea entre El Fargue y Órgiva, que atraviesa el Valle de Lecrín ... y que de esta forma queda paralizada. Este documento, que es recurrible ante la propia administración por la empresa, frena el trámite ambiental de esta 'autovía' eléctrica contra la que se presentaron 4.000 alegaciones.
El procedimiento administrativo en el que se encontraba inmersa la línea ha caducado. La Junta ha archivado el proceso por el que la empresa Red Eléctrica Española solicitó la 'autorización ambiental unificada' del proyecto. El motivo es un incumplimiento de la empresa durante el proceso administrativo. La Junta reclamó a Red Eléctrica Española una documentación «necesaria» y no ha respondido. Ni en tiempo, ni en forma, según la documentación a la que ha tenido acceso IDEAL.
Esta empresa comenzó el año pasado la tramitación de una nueva 'autovía' de 220 kilovoltios entre El Fargue-Saleres y Órgiva. La oposición frontal la encontró en el Valle de Lecrín, una comarca que se levantó contra esta infraestructura porque la considera perjudicial para el medio ambiente y el paisaje. Así lo manifestaron vecinos y empresarios en las alegaciones que presentaron contra el trámite medioambiental, el que ahora ha archivado la propia Junta.
El 19 de septiembre de este año, basada en un informe del jefe de servicio de protección ambiental, la delegada de Medio Ambiente granadina, María José Martín, ha declarado la caducidad del procedimiento de autorización ambiental de la línea El Fargue-Saleres-Las Gabias-Órgiva y ordenado el archivo del expediente administrativo.
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El motivo, según se desprende de este informe, es que Red Eléctrica Española (REE) no mandó una documentación solicitada. El 25 de abril de 2019 la administración requirió a la empresa información «necesaria» para completar el expediente y continuar con la tramitación de la línea. La delegación dio un plazo de 10 días y advertía de que, pasados tres meses sin recibir esos datos, se acordaría la caducidad del procedimiento, como así ha sido. Fuentes de Medio Ambiente resaltan que en todo este tiempo «no han recibido la información» por parte de la empresa.
Esto paraliza la tramitación de la línea y la empresa tiene la opción de presentar un recurso ante esta misma administración. Como la 'autovía' eléctrica afecta a dos provincias, la consejería tiene que pronunciarse también, algo que le ha pedido ya la delegada granadina de Medio Ambiente.
El proyecto se empezó a tramitar con el PSOE en la Junta y el nuevo gobierno de la administración autonómica ya había mostrado su recelo al recorrido actual de la línea de alta tensión. Quería que se modificase el trazado por la comarca del Valle de Lecrín, donde había provocado mucho rechazo social.
La delegación granadina del Gobierno andaluz ya expresó en junio –ante el Defensor del Pueblo, que les había hecho un requerimiento para que manifestasen su postura– que «técnicamente» era posible variar el recorrido y que la Junta estaba de acuerdo con este cambio de trayecto.
Un«problema heredado»
En junio, la Junta ya dijo que se había encontrado con este «problema heredado» y que quería mostrarse sensible con la movilización social del Valle de Lecrín. Allí, la plataforma 'Di no a las torres' alerta de que esta infraestructura se cargaría la comarca y estima la pérdida económica en 16 millones al año por la caída del turismo si existiesen unos postes de la luz de 80 metros de alto atravesando esta tierra que «vive del paisaje».
Antes de manifestar que era mejor cambiar el trazado, la Junta ya tenía en su poder un informe medioambiental de abril de 2019 que advierte de inconvenientes y hace una lista de medidas correctoras. Es el informe técnico del servicio de Gestión del Medio Natural, que apunta la afección del trazado actual a las aves rapaces, la vegetación, el monte público y los hábitats naturales.
Ante este documento, la Junta pidió más información a la empresa y no la ha recibido.
Medio Ambiente solicitó a REE que se propongan y justifiquen «modificaciones al proyecto necesarias o medidas correctoras» a las afecciones medioambientales que se le han detallado. Red Eléctrica Española tenía solo diez días de plazo para contestar y, pese que pidió una prórroga, solo se le hubiesen concedido cinco días más, según informan desde Medio Ambiente, que ha caducado la tramitación al no haber tenido respuesta en septiembre de este año.
Un segundo informe
También existe otra petición de documentación anterior (de marzo, un mes antes) referida a un informe medioambiental del director del Parque Natural de Sierra Nevada de diciembre de 2018. El documento señala que un trozo de la línea, Las Gabias-Órgiva, afecta a este espacio natural protegido. Aquí también se piden correcciones que la empresa «no manda».
La línea eléctrica es necesaria y hay que construirla. Pero la tramitación vuelve al punto de partida.
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