El Defensor del Pueblo investiga la eliminación de líneas en colegios rurales

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Alrededor del 90% de los alumnos de Colegios Públicos Rurales de Bérchules, Torvizcón y Pitres, ubicados en la Alpujarra granadina, secundan desde el inicio del curso una huelga para reclamar a la consejería de Educación más unidades escolares y más docentes. Lo hacen para protestar por la eliminación de líneas y al considerar que la pérdida de docentes impide su acceso a una educación con unos mínimos estándares de calidad.

Según la información del Defensor del Pueblo Andaluz, Bérchules ha perdido una unidad por lo que se ha agrupado a los alumnos de Infantil -3, 4 y 5 años- y de primero de Primaria, trece en total, mientras que en Juviles se mantiene una solo unidad en la que se atiende a 13 niños de seis niveles diferentes. Además, algunos de los docentes tienen una itinerancia entre los distintos colegios rurales que complica la tutoría, provoca que en ocasiones dos docentes diferentes impartan una misma asignatura o que se solapen esos desplazamientos y se complique cumplir el horario lectivo.

El Defensor del Pueblo Andaluz ha incoado un expediente de queja de oficio para conocer los motivos que han justificado la supresión de líneas y ha solicitado un informe pormenorizado a la delegación territorial de Educación.

Maeztu ha relacionado esta queja con el fenómeno de la despoblación, una preocupación que va a ser uno de las señas de identidad en su renovado mandato y que representa retos para paliar las consecuencias de la 'Andalucía vaciada'.

«Es un problema en educación, en sanidad, en temas de movilidad, en exclusión financiera... todos estos fenómenos van a alterar la calidad de vida de los zonas rurales y de los municipios pequeños», ha apuntado Maeztu, que ha reclamado medidas para que estén cubiertas las necesidades de los vecinos de los pueblos y, en especial, de mayores y niños.