El presunto cerebro del robo de la calle Recogidas tiene más de 60 antecedentes
Fue encarcelado junto a su hijo y un tercer compinche después de reventar supuestamente una caja fuerte en una inmobiliaria del centro de Granada
En febrero de 2017, tres sospechosos de un intento de robo en una joyería de Orense se sentaron en el banquillo de los acusados, pero ... se libraron de la cárcel porque la justicia gallega tardó demasiado tiempo en investigar el caso.
Se da la circunstancia de que después del asalto frustrado –sonó la alarma cuando estaban en plena faena–, los ladrones huyeron a toda pastilla en dirección a Vigo y sacaron de la carretera a uno de los coches de la Policía que les pisaban los talones. Pero todo eso ocurrió en 2010 y la vista judicial no se celebró hasta siete años después. Los jueces aplicaron a los reos, que reconocieron los hechos, la atenuante «muy cualificada» de dilaciones indebidas y los procesados fueron condenados a pagar unas multas o a realizar trabajos sociales.
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Pues bien, uno de los tres encausados en aquel procedimiento está encarcelado desde hace un par de días en la penitenciaría granadina de Albolote tras ser sorprendido, supuestamente, cuando reventaba una caja fuerte de una empresa inmobiliaria que está ubicada en un edificio de la calle Recogidas, en pleno centro de Granada. La Policía Nacional también capturó a su hijo y a un tercer compinche, que igualmente han sido enviados a prisión por un delito de robo con fuerza.
El suceso ocurrió alrededor de las cinco de la madrugada del pasado 21 de agosto y los presuntos delincuentes ya están entre rejas.
Además de la condena que le cayó en Orense, el presunto cabecilla de la banda acumula un historial delictivo que suma más de 60 antecedentes y su hijo, casi treinta. Ambos, junto al tercer implicado, se desplazaron desde un municipio de la provincia de Madrid, donde residen habitualmente, para dar el golpe en Granada.
Profesionales
Sin embargo, parece que hicieron demasiado ruido y la Policía Nacional recibió varias llamadas que alertaban de la presencia de extraños en un edificio del centro de la capital. En este sentido, dos de los supuestos asaltantes fueron sorprendidos con las manos en la masa, mientras que el tercero fue atrapado ya en el exterior del inmueble. Los patrulleros les intervinieron 25.000 euros y diversas herramientas, caso de un soplete para cortar metales.
Presuntamente, los cacos serían unos profesionales del robo que habrían perpetrado asaltos en las grandes localidades del cinturón de la capital de España y en otras provincias del país.
Sea como fuere, lo cierto es que su carrera criminal se ha visto frenada en Granada gracias a la rápida intervención de la Policía Nacional.
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