La Parrillita cerrará sus puertas en Granada
Una década después de su apertura sus dueños buscan traspasar el negocio tras vivir «grandes momentos» junto a sus clientes
Alberto Flores
Granada
Domingo, 13 de marzo 2022, 00:08
Decir adiós es muy difícil en algunas ocasiones. Sobre todo cuando se tratan de despedidas que son para toda la vida. Una como a la ... que está haciendo frente estos días Eduardo Rodolfo Dailoff, que cerrará su negocio de forma definitiva por jubilación. Es el propietario de La Parrillita, un lugar de comida y tapeo argentino que lleva en Granada desde hace una década. Y ahora, con él a punto de cumplir 70 años, ha llegado el momento de dar un paso a un lado y comenzar a disfrutar de la jubilación, aunque todavía no se haya hecho a la idea de vivir si su negocio, en el que lo ha dado todo.
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Eduardo es de la Patagonia, una región del sur de Argentina, que decidió marcharse en el año 2000 a España «a probar mejor suerte» junto con la familia. Tras pasar un tiempo en La Línea de la Concepción, ya con sus hijos en la universidad, decidieron cambiar el Campo de Gibraltar por la ciudad de Granada, donde habitan desde 2012. «Llegamos a Granada con la idea clara de montar un negocio de restauración con carnes y cortes argentinos», cuenta Eduardo, que explica que su objetivo no era otro que el de «mostrar a la gente nuestras tradiciones y gastronomía».
Y junto a él, que solía ocuparse de las carnes y sus cortes, siempre ha estado María Laura, su mujer, que ha sido la encargada de la cocina de La Parrillita. Las mejores piezas de carne a la argentina y muchos otros platos variados de su gastronomía, porque aunque destaque por sus asados, la comida de este país es mucho más que eso. Pero, aunque esto sea lo que más les apasione, ya ha llegado la hora de un merecido descanso: «Mis hijos es lo que me aconsejan y el cuerpo lo requiere también, no quería dejarlo aún porque siempre me ha gustado esto y todavía no se que haré después».
«Mis hijos me aconsejan que pare y el cuerpo lo requiere también, no quería dejarlo aún porque siempre me ha gustado esto y todavía no se que haré después»
Eduardo Rodolfo Dailoff
Propietario de La Parrillita
Reconoce que ha vivido grandes momentos en La Parrillita, «sobre todo antes de la pandemia», ya que después le tocó vivir de primera mano los efectos de la covid-19, como todos los negocios de hostelería. «No tuvimos ayuda de ninguna índole y también eso es lo que nos ha llevado a tomar esta decisión. Proseguir ahora, tal y como están las cosas, es muy difícil y todo recae sobre los hombros del hostelero». De hecho, cree que uno de sus errores pudo haber sido tratar de mantener su carta con los mismos precios durante estos últimos años.
Pero, más allá de esta difícil última etapa al frente de su negocio, prefiere quedarse con la parte positiva. «Estoy muy contento con todos nuestros clientes y me quedo muy satisfecho con todo lo que hemos hecho», asegura el argentino, que reconoce que le da «mucha pena» tener que cerrar. «Es una nostalgia muy grande que me corre por las venas… Me doy cuenta de que aunque sea mayor no tengo esa fortaleza todavía de decir que me desprendo de La Parrillita y ya está».
Por el momento, mientras busca un traspaso para su negocio, La Parrillita continuará abierta. Y, aunque no se quiera hacer a la idea de vivir sin su restaurante, tiene claro que su jubilación la disfrutará en Granada. «Mi familia está aquí y ahora me toca disfrutar de la ciudad. Hemos encontrado un lugar muy parecido a nuestra casa, San Martín de los Andes, y estamos muy contentos aquí», finaliza Eduardo, que encara los últimos días al frente de su parrilla.
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