Un estudiante de la UGR habla desde Milán: «Mis padres quieren comprarme el billete de vuelta»

Este joven granadino admite que su miedo y el de su familia, en la actualidad, es más a «quedarme aislado y sin poder salir de Italia» que al propio coronavirus. «Yo he estado leyendo y mirando información y quienes han muerto aquí tenían otras enfermedades», dice.

Gran parte de sus amigos españoles han vuelto a sus casas. En la residencia en la que vive hoy –miércoles- ya «no permiten entrar a nadie que no esté aquí». Agrega que a la calle sí les dejan salir y comenta que los supermercados «a los que he ido están casi vacíos porque la gente está comprando por miedo a quedarse sin comida».

Alberto está estudiando en Milán, en el politécnico, desde septiembre. Este lunes tenía el último examen del primer semestre y no lo ha podido hacer. «Me faltaba por hacer un examen oral», puntualiza. Lo que complica más la situación de los estudiantes porque quienes solo estaban el primer semestre ahora tendrán que volver solo para ese examen cuando se haga. «Un amigo mío de Santander tenía el examen y como no lo ha podido hacer; se ha tenido que volver a España y ahora no sabe qué ocurrirá», describe. Tenían un mensaje de que las clases se retomarían el lunes, día dos de marzo, pero ahora «lo han quitado y no tenemos fecha».

A la incertidumbre del virus, de la situación que está viviendo en Italia, se suma qué pasará con su curso. Quiere terminar este año sus estudios y no perder un semestre. «No quiero perder un año por culpa de esto», apunta. Espera ver qué soluciones les dan tanto desde Italia como desde la UGR. No obstante, admite que «es un follón».

«La Universidad de Granada nos ha mandado algunos correos. Diciendo que están hablando con los respectivos comités para ver qué solución nos dan», explica Alberto. «Aquí –Milán- han cerrado la Universidad y todo tipo de sitios públicos», matiza. Le han dicho que no vaya a sitios con mucho tránsito de gente, evitar tocar cosas y llevarse las manos a la cara o boca y lavarse bien las manos.

Este joven granadino no tiene miedo, lo dice varias veces, al coronavirus por lo que está leyendo de momento. Además, relata que su madre ha hablado con una epidemióloga y «nos ha dicho que no nos preocupemos». No obstante, no descarta coger un vuelo lo más pronto posible para volver a Granada porque en Italia no puede hacer nada y, repite, teme quedarse aislado sin poder salir de la ciudad ni el país.

La vicerrectora de Internacionalización de la Universidad granadina, Dorothy Kelly, mandó este martes un mensaje de tranquilidad a los 234 estudiantes que tienen en el norte de Italia. Además, dijo que están en estrecho contacto con la Agencia Nacional Erasmus, que a su vez está en contacto con la Agencia italiana y con la CRUE. «Es decir haciendo un seguimiento muy de cerca de toda la situación», destacó.