Así será el nuevo paseo de Romayla a los pies de la Alhambra
La ribera del Darro será transitable, pero no cambiará la 'postal' desde el Paseo de los Tristes
Será un camino entre dos aguas: la de la acequia Romayla y la del Darro. Para entender el paseo que granadinos y turistas podrán recorrer ... en 2031 hay que partir de la idea de que la obra pretende recuperar el cauce de la histórica acequia, cuya estructura se conserva sólo en algunos tramos.
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Este caudal venía de la ladera del Darro, pasaba por el molino del Rey Chico, luego atravesaba otro molino y llegaba al 'Aljibillo' antes de desembocar en el acueducto de San Pedro. Ahora partirá, según los planos presentados hoy por el arquitecto del Ayuntamiento de Granada Rogelio Martínez, de la galería soterrada del Arroyo del Rey Chico.
Del parque junto al edificio cultural saldrá el nuevo paseo, en la zona del antiguo Carmen del Granadillo. En dos alturas, este camino con vegetación, algún banco siempre que no comprometa las vistas y suelo de alpañata -una tierra de tono arcilloso- llegará hasta el hotel Reúma. Una rampa permitirá bajar a un nivel inferior, más próximo al río, que desembocará en la terraza más baja, al mismo nivel que el antiguo sanatorio. En esta zona, la acequia tiene un 'salto' de tres metros y su cauce queda soterrado hasta al desembocadura a la altura de la plaza de las Chirimías.
Este entorno es lo más llamativo del proyecto. Aquí, el paseo tiene tres alturas distintas. Para salvarlas, y que el nuevo Paseo de Romayla sea plenamente accesible, se va a instalar un núcleo vertical de comunicación. Habrá varias terrazas conectadas por un ascensor que quedará oculto en la instalación.
El suelo del paseo, el arbolado, los muros de contención y las vallas transparentes para evitar caídas a otro nivel respetarán la imagen actual de la colina desde el Paseo de los Tristes, una 'foto' que según las recreaciones de los arquitectos quedará intacta.
En paralelo, la Alhambra trabaja para acelerar la recuperación del hotel Reúma, espacio que pretende convertir en un centro cultural. Se han desarrollado los estudios geotécnicos previos a licitar la elaboración del proyecto. La reforma del inmueble es compleja por su estado de conservación. En un escenario ideal, el Reúma se estrenaría a la par que el paseo de Romayla.Por ahora, el primer plazo que fija la dirección del Patronato es la publicación de los pliegues durante los primeros meses de 2020.
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