La víctima del último homicidio de Granada entró a robar hace días en la misma casa

En concreto, un varón de 28 años sufrió cortes en la mano, fue trasladado por los propios agentes de la Policía Nacional a un centro sanitario y detenido inmediatamente después en relación con estos hechos. Según ha confirmado el cuerpo, ambos tenían antecedentes por delitos relacionados con las drogas, por lo que la principal hipótesis es que este sea el móvil del enfrentamiento y se investiga como un homicidio. Además, según ha podido saber IDEAL, la víctima le había comprado a los moradores droga en el pasado. Asimismo, unos días antes ya había entrado supuestamente a robar y se había llevado tanto droga como dinero.

El suceso tuvo lugar sobre las 22.50 horas en la calle El Guerra de la capital, una vía que comunica la zona de Los Mondragones con la avenida Juan Pablo II. La Agencia de Emergencias 112 recibió un aviso en el que notificaban este violento episodio. Según explica el 112 y confirma la Policía Nacional, el fallecido llegó hasta la vivienda en la que se produjeron los hechos en una motocicleta, accedió al interior y es cuando se produjo el enfrentamiento. Posteriormente, salió de la misma y se subió en la moto para emprender la huida, pero tras avanzar pocos metros cayó desplomado al suelo. El hombre fallecido presentaba cortes en la cara.

En un principio parecía que se trataba de un accidente de tráfico, pero fue la propia Policía la que confirmó al 112 que no era un siniestro vial, sino que se había producido un asalto violento en una vivienda. Sin embargo, al acudir la Policía Nacional, comprobó que no era un intento de robo sin más, sino que había algo más detrás de este episodio.

Al lugar de los hechos también acudieron agentes de la Policía Local y los servicios sanitarios. Tras confirmar la muerte de este hombre de 45 años, se activó el protocolo judicial. Ahora será el informe del forense el que aclare las causas de la muerte de este varón en Granada.

La principal incógnita es qué ocurrió dentro del número 52 de la calle El Guerra, en la que, al parecer, se vendía droga ocasionalmente. IDEAL ha podido saber, por fuentes próximas a la investigación, que en aquel momento había una pareja en el interior, que lleva unos meses viviendo de alquiler. Escucharon sonar el timbre una vez y se extrañaron, puesto que solo esperaban a dos amigos que habían ido a comprar a una tienda cercana y suelen llamar tres veces al timbre, no una. Por las cámaras de seguridad vieron cómo un hombre accedía al jardín. Después, este presuntamente rompió el cristal de la puerta y la abrió, ya que las llaves estaban puestas.

Tanto el morador de la casa como el presunto ladrón cogieron, según los primeros indicios, dos cuchillos de cocina respectivamente. Iniciaron un forcejeo que poco después se trasladó a la vía pública. Allí continuaron el enfrentamiento. El supuesto ladrón acabó con cortes en la cara. Los dos amigos de los moradores llegaron y también fueron testigos. Los propios inquilinos llamaron al 112 y dijeron que se había producido una pelea después de que un individuo intentara entrar en su casa a robar.

Los agentes de la Policía Nacional que acudieron al aviso encontraron a un hombre tirado en la acera. Junto a él, unos guantes negros y un cuchillo con restos de sangre, tal y como precisan las mismas fuentes. Los objetos fueron requisados para su análisis por la Policía Científica. También hallaron la motocicleta en la que presuntamente se había desplazado la víctima. Testigos explican que el vehículo se le había caído encima, así que la apartaron y lo ayudaron a levantarse del suelo. Acto seguido, el hombre se desplomó.

La autopsia determinará la causa de la muerte. Las heridas de arma blanca que presentaba, en principio, no parecían tan graves como para costarle la vida. Si hubiera sido un accidente de tráfico, su estado físico hubiera sido también más deplorable. Por ello, según ha podido saber este periódico, la Policía Nacional no descarta ninguna hipótesis, ni siquiera la de una muerte natural por infarto, por ejemplo.

El grupo de Homicidios de la Jefatura de Granada se ha hecho cargo de la investigación. Este lunes por la mañana han entrevistaron a diversos vecinos en busca de pistas sobre lo ocurrido. Según el testimonio de los inquilinos, la víctima les había comprado droga en el pasado (marihuana y ketamina). Unos días antes, dicen, este hombre ya había entrado a robar y se había llevado tanto droga como dinero.