Tribunales en Granada
A juicio por intentar hacer pasar por Nivea cuatro kilos de cocaína en GranadaDos jóvenes brasileñas se enfrentan a sendas penas de siete años y medio de cárcel al ser detenidas en el aeropuerto de Chauchina con droga oculta en botes de cremas corporales
Eran botes de Nivea y contenían una sustancia blanca como la Nivea, pero no era Nivea sino cocaína. Casi cuatro kilos de droga con una ... pureza superior al 60% y un valor el mercado negro de 125.000 euros.
Ocurrió a las once y media de la mañana del 3 de enero de este mismo año en el Aeropuerto de Granada y las presuntas porteadoras del alijo, dos jóvenes brasileñas, se enfrentan ahora a sendas penas de siete años y medio de cárcel por la supuesta comisión de un delito contra la salud pública por traficar con un estupefaciente que puede causar graves daños a quienes lo consumen.
La fiscalía provincial reclama también que las dos procesadas, en el caso de que el tribunal las declare culpables, abonen, cada una de ellas, una multa de 300.000 euros.
Sangre fría
Según desveló en su día la Guardia Civil, las dos presuntas narcos cayeron porque carecían de la suficiente sangre fría que exige el 'oficio' de transportar drogas.
Los agentes del destacamento fiscal y de fronteras del aeródromo Federico García Lorca observaron que las dos viajeras estaban excesivamente inquietas. Acababan de completar el trayecto entre la ciudad carioca de San Paulo, Madrid y Granada, y su nerviosismo las delató.
A los miembros del instituto armado también les llamó la atención que las dos sospechosas, de 25 y 28 años, acarreaban un equipaje de un «volumen poco habitual». Eran indicios de que, presumiblemente, se traían algo turbio entre manos.
Los guardias civiles retuvieron a las dos jóvenes y registraron sus maletas. En apariencia, no había nada raro, pero finalmente descubrieron que la mercancía ilegal iba oculta en envases de cremas corporales, champús y otros productos de cuidado personal.
Formación especializada
Una de ellas llevaba seis botes y la otra, cinco. Todos esos recipientes habían sido rellenados «de una sustancia estupefaciente que, una vez analizada por el organismo competente de sanidad, resultó ser cocaína con una pureza del 62,98%» y «un peso neto» 3.548 gramos. Su precio en el mercado clandestino de narcóticos habría sido de 124.981 euros.
Los agentes de las fuerzas de seguridad que prestan servicio en los aeropuertos reciben formación especializada para percibir comportamientos anómalos para facilitar la detención de los viajeros que pueden ser narcotraficantes.
Además, todos los ocupantes de los vuelos que tienen conexiones con terceros países son sometidos, por norma, a exámenes más exhaustivos.
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