Granada pierde un valioso curso para formar camareros por falta de alumnos
La gerente de la Escuela de Hostelería La Inmaculada cree que la solución a la falta de mano de obra en el sector pasa por motivar a los profesionales con buenas condiciones
Si hay unos alumnos que pueden salir de la puerta de su centro educativo con un contrato bajo el brazo -si quieren trabajar de inmediato- ... son los que se gradúan cada año en los ciclos de cocina o sala de las dos escuelas de hostelería de la capital, el Centro de formación Profesional Hurtado de Mendoza (público), donde salen cada año más de 300 de los distintos ciclos y la Escuela de Hostelería La Inmaculada (privado), que forma a 60. Las empresas granadinas se los rifan.
«Parecemos una oficina de empleo más que un centro de formación, nos llaman continuamente demandando cocineros y camareros», señala la gerente de la Escuela de Hostelería La Inmaculada, Inmaculada Criado.
En plena crisis por la falta de profesionales, que pone en serios aprietos por las empresas, Criado cree que la solución pasa por prestigiar las profesiones hosteleras y motivar a los jóvenes, con buenas condiciones laborales, para que quieran ser camareros, jefes de sala o cocineros. «No sirve de nada lamentarse, hay que pasar a la acción mejorando salarios y condiciones. Hay que pagarles más, existe un desfase entre la cocina y sala que hay que corregir porque son dos patas igualmente importantes en una empresa de hostelería. De nada sirve que un plato sea exquisito si te lo sirven mal», esgrime Criado, que es partidaria de subir precios en los establecimientos, si es necesario, para mejorar las condiciones de las plantillas.
La falta de vocación por la hostelería se ha puesto de manifiesto en la pérdida de alumnos del cursos de especialistas de sala, para formar profesionales como camareros y maitres, que se han dejado de impartir este año en la escuela granadina por falta de alumnos. «Son cursos prestigiosos y muy valiosos que financiaba 100% la Fundación Mahou San Miguel, por lo que son gratuitos para los alumnos. Los hemos hecho en varias ediciones y tienen un gran nivel, por lo que es una pérdida importante para Granada que no se impartan», lamenta la gerente de la Escuela de Hostelería La Inmaculada.
Desde Fundación Mahou San Miguel han colaborado durante ocho años con el CFP La Inmaculada dando becas a jóvenes para impulsar su formación en cocina y también llevaron a cabo cursos para la especialización en gestión de sala. Durante ese tiempo, 135 alumnos se beneficiaron de esta colaboración.
«De estos cursos salían promociones de 30 profesionales con un nivelazo», apunta la gerente. En este sentido, Criado cree que las empresas tienen que valorar esta formación de excelencia, que además es gratuita. En su opinión, los propios establecimientos, que la conocen a través de los comerciales de la marca cervecera, tienen que enviar a sus empleados a formarse. «Se sigue impartiendo en otras ciudades y solo ha desaparecido en Granada porque no se han completado las matrículas. El primer año fueron 30, el segundo 20, el pasado solo doce... no se puede mantener un curso sin alumnos con los altos costes que tiene y esto es muy triste y un desastre para Granada, con la falta de profesionales que hay», incide la gerente de la escuela de hostelería.
«Hay que dejar la queja y pasar a la acción. Hacer una campaña potente para formar a trabajadores que ya están en este mundo, motivarles y pagarles más», insiste.
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