Raquel Pérez | Viuda del agente José Manuel Arcos asesinado en Granada
«Este Gobierno maltrata a quienes dieron la vida por España y a sus familias»La viuda del agente asesinado en Granada reclama más medios tras la tragedia de Barbate, mientras mantiene abierta la lucha judicial para reclamar a Interior la indemnización económica
Nieta, hija y esposa de guardia civil, cuando el teléfono fijo de su casa sonó en la madrugada del 15 de octubre, en la que ... su marido estaba patrullando, Raquel Pérez sabía que podía saltarse el dígame. «¿Qué le ha pasado?», gritó. «Pasamos a recogerte», le respondieron. Unas horas de angustia en el hospital precedieron a la entrada de lleno en el infierno. «Mi vida se fue con él», dice Raquel. «Desde entonces no vivo, sobrevivo».
Estos días, a raíz de la tragedia de Barbate, con dos guardia civiles muertos tras ser arrollados por una narcolancha, Raquel no puede dejar de llorar de rabia, dolor e impotencia. Se le han removido las entrañas y su cabeza y su corazón están con esas familias. «Cuanto dolor, cuanta pesadilla les queda por delante hasta llegar donde yo estoy», esgrime Raquel, rota.
«Mi marido, igual que estos agentes, prefería morir que matar. Y murieron porque les enviaron a luchar sin medios y sin que se les reconozca que realizan un trabajo de riesgo. Ni uno más. Se tiene que acabar este trato inhumano a los que nos defienden», reclama la viuda de Arcos en una entrevista llena de duras declaraciones. El shock de la muerte de su marido ha llevado a Raquel a desarrollar enfermedades muy graves y sin embargo prefiere que no se sepan los detalles. «Yo no quiero dar pena». Lo que quiere es denunciar desde la dignidad que, cinco años después, el dolor de la familia se ve agravado por la batalla judicial abierta para intentar que el Estado asuma la indemnización fijada en la sentencia. Quiere gritar alto que se siente «pisoteada» y sobre todo quiere exigir dignidad y medios para las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. «Este Gobierno está maltratando a las viudas y los huérfanos de los guardia civiles que dieron su vida en acto de servicio. La parte económica es dura, pero lo peor es la humillación y el daño moral. Negarte el derecho a ser resarcido es infligirte un doble dolor. Es decirte que estás sola, que no te lo mereces», cuenta.
Sobre todo sufre por sus hijos que perdieron su guía, su referente, en una edad muy complicada, y de paso oportunidades en la vida, al tener que salir adelante con una sola paga de viuda. «¿Cómo pueden abandonarnos así? ¿No se acuerda Marlaska de cuando era juez en el País Vasco? ¿Quien le hacía de escudo? ¿Quién le protegía?¿Por qué este desprecio?Qué falta de corazón», clama Raquel.
No soporta ver las imágenes de Barbate. Igual que, más de cinco años después, no logrado volver a oír la voz de su marido en audios. «Son canallas los que les mataron y miserables los que les mandaron a luchar sin medios y lo digo por Marlaska», denuncia. Está decidida a pelear «hasta el último aliento» en los tribunales y cree que es importante destacar públicamente el trabajo que están haciendo Javier, director de HispaColex Bufete Jurídico y todo su equipo. «Desde el primer día se implicaron hasta el fondo, me cogieron de la mano y no me han soltado, me han protegido y lo más importante, lo han hecho a cambio de nada, desde el corazón», concluye.
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