Facua atiende a afectados por el cierre de las clínicas de depilación Lenus en Granada
La asociación ha recibido más de una decena de llamadas para asesorarse o iniciar procesos de reclamación
Afectados por el cierre de las clínicas de depilación Lenus están acudiendo a las asociaciones de consumidores para asesorarse y/o iniciar procesos de ... reclamación con ellas. Facua, una de las más conocidas, ha recibido más de una decena de consultas. Está informando a los afectados sobre su derecho al reembolso del importe de los bonos y tratamientos que hayan pagado y no vayan a recibir -o, en su caso, de la parte proporcional-.
Según desveló IDEAL, más de setenta granadinos han denunciado la pérdida de su dinero tras cerrar sin previo aviso la clínica. Los afectados han desembolsado entre todos más de 13.000 euros; algunos han disfrutado de varias sesiones, otros tenían casi todo el tratamiento por delante. Las denuncias se han interpuesto ante la Guardia Civil, la Policía Nacional -encargada de la investigación- y en el propio juzgado.
Otros han decidido acudir a la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) o Facua, entre otras. Esta última está recomendando a los perjudicados que formulen una reclamación contra el centro, exigiéndole el cumplimiento de sus obligaciones. En caso de que los tratamientos se hayan abonado mediante una financiación bancaria vinculada al contrato firmado con el centro de estética, los usuarios también deben presentar una reclamación a la entidad bancaria con la que hayan suscrito el préstamo, informándoles del cese de actividad del centro y exigiéndole, por ello, la paralización del cobro de los recibos.
Facua también aconseja a los afectados que soliciten su historia clínica, con el fin de poder reclamar el crédito de la parte del tratamiento no realizado en caso de que la empresa entre en concurso de acreedores. También pide a los usuarios que conserven toda la documentación relativa a los pagos y el contrato hasta que hayan recuperado todo el dinero.
Seguro de empresas
Una demanda histórica de Facua es que las empresas tengan por obligación un seguro de responsabilidad civil para que, en caso de que quiebren o realicen malas prácticas, los clientes no salgan perjudicados. Según explica el colectivo a este periódico, una ley recoge este planteamiento, pero nunca se ha desarrollado una norma específica que la desarrolle, por lo que reclama al Gobierno que lo regule.
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