El enésimo giro en el caso de Juana Rivas
La Audiencia señala que la madre habría provocado que su hijo no volviera con su padre después de Navidad, entre nuevos intentos de la familia para que se quede
El caso Juana Rivas vira ligeramente en un momento decisivo. Hoy está prevista la entrega del hijo menor a su padre. Francesco Arcuri ostenta desde ... hace casi una década la guardia y custodia del menor, una decisión que los tribunales italianos ratificaron este febrero. La víspera del nuevo intercambio –aplazado el martes por el bien del niño de solo once años– ha estado llena de altibajos, cruces de denuncias y peticiones desesperadas a las autoridades, en sintonía con la deriva desde su origen de este asunto, que se litiga en los tribunales y en los medios de comunicación desde su inicio.
En medio de esta debacle y pugna de las partes, ayer la Audiencia Provincial ordenaba investigar a la madre de Maracena otra vez por sustracción de menores. El tribunal granadino ha admitido a trámite y estimado parcialmente una denuncia presentada por el padre y expone que, tras las pruebas documentales remitidas por los tribunales italianos, Juana Rivas habría provocado «intencionadamente» la puesta en marcha de una medida cautelar en España para frenar el regreso de su hijo menor a Carloforte tras pasar las vacaciones navideñas.
Cabe recordar que Juana Rivas se benefició en noviembre de 2021 de un indulto parcial del Gobierno tras ser condenada por la sustracción de sus hijos en 2016. La medida de gracia estaba sujeta a que no cometiera ese delito en un plazo que termina a finals de este 2025, por lo que Rivas podría verse de nuevo en serios problemas.
En el auto, en poder de este medio, el tribunal considera que es «posible inferir» que Juana Rivas, que había promovido ante la Corte de Apelación de Cagliari la modificación del régimen de custodia de su hijo menor, aprovechó la autorización del desplazamiento del niño a España para que pasara las navidades con su hermano y «retuvo al menor consigo en territorio español, incumpliendo la decisión de devolución de los tribunales italianos, que en enero le insistieron en que el chico debía volver el 8 ese mes.
Para conseguir que el menor se quedara en Granada, la audiencia apunta que «provocó el dictado de una resolución judicial cautelar del órgano jurisdiccional, el Instrucción 4, cuando éste se encontraba en funciones de guardia» para así suspender la entrega. «Una situación ilícita que la denunciada incluso mantuvo con posterioridad» tras la resolución definitiva sobre la custodia, remacha el tribunal. La Justicia italiana ratificó el 18 de febrero que la custodia recaía en exclusiva a Arcuri y exigieron el regreso del menor al país, un regreso que no se produjo.
«Los malos tratos de los que afirma haber sido víctima y, más en general, las situaciones intolerables y peligrosas para el menor que denuncia parecen ser el resultado de su voluntad de oscurecer la figura paterna«
De hecho, la Audiencia Provincial de Granada recuerda en su resolución que esta situación obligó al padre como progenitor custodio a instar ante el juzgado de Primera Instancia número 3 de Granada un procedimiento de ejecución de la orden para lograr el reintegro de su hijo, una orden que las autoridades tratan de cumplir.
«Sin consideración» por su hijo
Este auto de la Audiencia responde a un recurso del abogado de Arcuri, dado que el Juzgado de Instrucción 4, el órgano que puso en marcha la medida cautelar solicitada por Juana Rivas, archivó la denuncia. A este recurso de Arcuri se adherió el Ministerio Fiscal, al considerar que la medida cautelar decayó en el mismo momento en el que se ratificó en Italia que la custodia era exclusivamente del padre. En cambio, la Audiencia desestima la petición del progenitor de investigar a la madre por maltrato habitual y lesiones psicológicas en el ámbito familiar. Entiende la sala que los hechos no revisten «en ningún caso los caracteres de delito».
Resulta llamativo que el auto del tribunal reproduce conclusiones de su homólogo italiano. «Los malos tratos de los que afirma haber sido víctima y, más en general, las situaciones intolerables y peligrosas para el menor que denuncia parecen ser el resultado de su voluntad de oscurecer la figura paterna frente a sus hijos y de asegurar su posesión exclusiva sobre ellos» o «Rivas persiste activamente en la empleo de sus hijos en el marco del conflicto con Arcuri, demostrando que no quiere encontrar ningún punto de acuerdo y que no tiene ninguna consideración y respeto por las necesidades de su hijo, quien ha sido sobreexpuesto en los medios de comunicación sin ninguna justificación», incluye el tribunal en su fundamentación.
El hijo mayor de Juana dice que se trata de doblegar la voluntad de su hermano
La noticia de esta nueva decisión de la Audiencia Provincial de Granada, adelantada por IDEAL, llegaba a la par que la interposición de una querella por parte del hijo mayor de Juana Rivas por supuestas coacciones por parte del servicio del Punto de Encuentro Familiar durante la entrega frustrada del menor a su padre el pasado martes. El joven, de 19 años, considera que una psicóloga trató de «doblegar» la voluntad de su hermano para «que admitiera de buen grado irse a Italia». Además, interesa como medidas cautelares urgentes la orden de alejamiento y suspensión de la entrega. Sin embargo, en el informe del Punto de Encuentro Familiar que se ha remitido a los juzgados se expone que la actitud del querellante también habría sido puesta en entredicho, al haberse extralimitado.
El hijo mayor de Juana Rivas, quien solicitó a los 16 años vivir con la madre y fue autorizado por los tribunales italianos, ha remitido también cartas a las autoridades españolas. «En 2017 me entregaron a Francesco. A partir de ahí fueron 5 años de abuso y de maltrato, hasta que tuve el valor de defenderme a los 16», dice la misiva.
Organizaciones como Amnistía Internacional o Save the Children han recibido también escritos con estas peticiones. El equipo jurídico se dirigió también al Minsiterio de Justicia para que invoque excepciones del Convenio de la Haya, excepciones que, a juicio de los defensores de Arcuri, no pueden aplicarse porque existe una causa abierta por sustracción de menores también en Italia.
Fuentes del ministerio apuntan al «maltrato psicológico al que se está sometiendo al niño por parte de los profesionales y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado»
Intervención del ministerio
Por si fuera poco, el Ministerio de Juventud e Infancia remitió ayer a la fiscalía un informe de la psicóloga. contratada por la familia Rivas que acompañó al menor al punto de encuentro. Según fuentes del ministerio, en él se testifica en primera persona el «maltrato psicológico al que se está sometiendo al niño por parte de los profesionales y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado». El tribunal, que encargó a los profesionales del servicio su propio informe oficial sobre lo sucedido en la entrega, ha decidido los pormenores del intercambio previsto hoy. Una cita que será más discreta que la pasada convocatoria y evitará la exposición del menor de 11 años.
Por último, cabe destacar que ambos progenitores mantienen causas abiertas en los juzgados. Arcuri será juzgado en septiembre por la Corte de Cagliari presuntos malos tratos, aunque ya la justicia italiana ha archivado una decena de procesos similares. Por su parte, Rivas será investigada de nuevo por sustracción de menores. Mientras tanto, continúa una pugna que está lejos de acabarse.
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