Asalta desnudo el piso de una mujer en Granada, se pone su bata y se hace la cena

El curioso asalto tuvo lugar en la noche del domingo en la calle Parra Alta de Cartuja. El presunto asaltante, que se había colado en el portal, llamó al timbre del bajo y la mujer, de avanzada edad, decidió abrir. No había visto a nadie por la mirilla, pero escuchaba ruidos fuera y pensó que podía tratarse de algún vecino en apuros. La puerta no se había separado apenas un palmo del marco cuando un pie se coló por el hueco. Con violencia, de un empujón, el hombre desnudo irrumpió en el domicilio.

La propietaria salió despavorida hacia la calle y empezó a gritar. Mientras tanto, el individuo cerró la puerta con llave. El piso tiene una ventana y desde el exterior los testigos no daban crédito. La dueña y los curiosos del vecindario que se asomaron a ver qué pasaba en el interior pudieron ver cómo el asaltante se paseaba con una bata de la señora y se preparaba con calma la cena e incluso se sentó cómodamente en el sofá.

Los residentes del bloque llamaron a Emergencias 112 de Andalucía. La Policía Local recibió el aviso a las 21.40 horas. Hasta la zona se desplazaron tres unidades. Fuentes de la policía relatan a IDEAL que trataron de que el sujeto abriera la puerta por iniciativa propia. Desde fuera, los vecinos observaban cómo el asaltante «ido», actuaba ajeno a todo lo que pasaba.

La Policía Local dio traslado de lo sucedido a los Bomberos y un retén se presentó en la zona. Los efectivos lograron, a través de un patio interior, forzar el acceso a la vivienda. En pocos minutos, el hombre fue detenido y trasladado a las dependencias de la Policía Nacional.

«Hubo un gran despliegue»

Poco antes de que los agentes recibieran la alerta del servicio de Emergencias, habían recibido varios avisos de la presencia de un individuo en calzoncillos vagando por la zona de la carretera de Murcia. El presunto autor del asalto a la casa de esta vecina es una persona sin hogar que padece además una enfermedad respiratoria infecciosa. Por eso, los agentes se pusieron mascarilla para entrar en el domicilio, según relatan las fuentes policiales consultadas por IDEAL

De acuerdo con el relato de varios testigos, la mujer tuvo que recibir asistencia sanitaria por una crisis nerviosa. «Le costaba respirar, se llevó un buen susto. Mi marido, que está un poco sordo, y yo estábamos viendo la tele. La ponemos muy alta y no escuchamos los gritos, pero sí vimos las luces de las sirenas. Hubo un gran despliegue», comenta una residente de un bloque aledaño. Otro de los vecinos explica que la afectada decidió pasar la noche en el domicilio de un allegado.

Pese al incidente, los inquilinos y la asociación de vecinos comentan que es un barrio tranquilo y «tocan madera» para que su suerte no cambie. A principios de febrero, otra de sus vecinas sufrió un atraco a punta de navaja y la colaboración vecinal logró retener al malhechor. «Aquí das una voz y salen todos los vecinos a ayudar. Somos solidarios y nos cuidamos los unos a los otros», destacan.

San Ildefonso es la conjunción perfecta entre los vecinos de toda la vida, los comercios de siempre, el ambiente de barrio, pese a estar en el mismísimo Centro y tener vida universitaria. «Aquí tenemos muy buena relación entre nosotros y los jóvenes que habitan los cursos son muy apañados. Esperamos no tener más problemas», comentan desde la asociación.