El presunto secuestrador lleva seis meses en libertad y está cuerdo, según los forenses
El único investigado ya vive en la provincia de Málaga, debe comparecer semanalmente en los juzgados y tiene prohibido pisar Maracena
Pedro G. R., el presunto secuestrador de Maracena y ya la única persona investigada en el caso, está cuerdo. Así lo han determinado los forenses ... que, por orden del juez que dirige el proceso, lo examinaron para estudiar su estado mental. «(...) No consta que sufra trastorno psiquiátrico alguno», resume el magistrado el resultado de la exploración médica.
Es más, el estudio añade que el imputado tiene una supuesta tendencia a simular o engrandecer padecimientos psíquicos. Presenta «presuntamente un patrón generalizado de falseamiento y exageración de síntomas psicopatológicos y neurocognitivos». El resultado del análisis es importante, ya que el titular de Instrucción 5 de Granada lo encargó para intentar conocer si Pedro G. R. estaba en sus cabales cuando, supuestamente, perpetró el secuestro de la edil de Maracena Vanessa Romero. En ese supuesto, su responsabilidad penal podría quedar atenuada, pero los facultativos no han observado que esté aquejado de un «trastorno psiquiátrico».
No obstante, el presunto secuestrador alegó en su día que tenía un «trastorno bipolar» por el cual le habían reconocido una discapacidad del 67%.
31 de julio
El sospechoso, que cuando ocurrieron los hechos era el compañero sentimental de la entonces alcaldesa del municipio granadino, Berta Linares, está en libertad provisional del pasado 31 de julio de 2023, hace ya casi seis meses.
El magistrado Josep Sola acordó la medida en una resolución motivada en la que explicaba que las pesquisas podían prolongarse más de los previsto inicialmente, lo que podría suponer un perjuicio para el preso preventivo, que estuvo en una celda del penal de Albolote desde el 24 de febrero hasta la mañana del último día de julio.
Desde entonces, ha cumplido con las condiciones que le impuso Josep Sola para liberarlo, a saber: comparecer cada semana ante los juzgados, no acercarse a la víctima del rapto ni pisar las calles de Maracena, en ambos casos durante un tiempo de 18 meses.
Prácticamente desde que abandonó el presidio, Pedro G. R. reside en un municipio de la vecina provincia de Málaga, que es de donde procede, y es allí donde formaliza el requisito de presentarse ante la justicia.
El magistrado también le retiró el pasaporte.
El hecho de que este asunto haya entrado en la fase conocida como procedimiento abreviado supone que es prácticamente seguro que el investigado se sentará en el banquillo de los acusados.
Es verdad que el dictamen en el que el juez ha adoptado esa decisión puede ser recurrido ante el propio jurista o la Audiencia Provincial de Granada, pero eso no paralizaría el procedimiento.
El próximo lunes, 15 de enero, expira el plazo para que las partes impugnen la resolución de Josep Sola, quien todavía ha de dictar el auto de apertura de juicio oral.
El juicio, dentro de unos seis meses
Así las cosas, la vista podría celebrarse dentro de unos seis meses, según fuentes jurídicas consultadas por IDEAL, una cita a que la no tendrán que acudir i la exalcaldesa de Maracena ni el exedil responsable de Urbanismo en el Ayuntamiento del área metropolitana (a no ser que sean citados como testigos), ya que el magistrado que dirige la investigación ha acordado el sobreseimiento libre de las actuaciones contra ambos. Esa decisión supone cerrar la causa para ellos al entender que no existen indicios racionales de que se produjeron los hechos que dieron motivo a su apertura.
El secuestro, que ocurrió el 21 de febrero, desembocó en una tormenta política en la que el PSOE terminó perdiendo la alcaldía de Maracena en los comicios del 28 de mayo.
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