Delegado federativo en Granada
La delegación granadina de la FAF defiende que Rubiales actuó «sin mala intención»José Manuel Molina, que asistirá a la asamblea de la RFEF este viernes, considera que la actitud del dirigente se ha sacado de contexto
En la tierra de Luis Rubiales el debate sobre la polémica suscitada por el comportamiento del presiente de la Real Federación Española de Fútbol en ... los festejos después de que la selección española femenina se proclamara campeona del mundo en Australia está en la calle. Sin embargo, de momento, no está en las instituciones políticas o en el mundo del fútbol. Solo la delegación granadina de la Federación Andaluza de Fútbol (FAF), a través de su presidente, José Manuel Molina Maza, expresó su opinión acerca de lo ocurrido.
Lo hizo ayer, a preguntas de este periódico. Y la postura del máximo dirigente del balompié granadino, a falta de las explicaciones que Rubiales debe ofrecerles mañana en la asamblea de la RFEF, es que se trató de un gesto «sin mala intención», producto de un momento de entusiasmo por el éxito alcanzado por la selección española. Molina Maza es también vicepresidente de la FAF y vocal de la nacional, por lo acudirá a la asamblea este viernes. Con sus palabras rompe una lanza a favor de Luis Rubiales.
«Yo valoro que el presidente lo hizo sin mala intención, por la alegría del momento y por cariño. No sé mucho más porque tampoco presencié aquello y no he hablado con nadie más», expresó Molina Maza. «Me han convocado para la asamblea del viernes y espero que allí se nos explique lo que estimen», abundó el dirigente, que además es delegado de la selección absoluta masculina, después de pasar por las secciones inferiores.
«No lo veo una agresión»
Molina Maza conoce bien en la cercanía al motrileño Rubiales, que fue con quien se incorporó a la Roja. «Solo hablo de él porque conozco su manera de ser en el ámbito personal», afronta. «Es una persona cariñosa, que saluda tanto a hombres como mujeres con dos besos de manera habitual. Cuando me ve, lo hace así conmigo», explicó a IDEAL un Molina Maza que precisamente siempre se ha caracterizado por ser una persona de trato respetuoso en sus formas.
Insistió en que detrás del gesto de Rubiales no se esconde ninguna intencionalidad negativa y que hay que tener en cuenta el contexto y las circunstancias que rodean a todo este asunto. «No sé el grado de complicidad que tenía con las jugadoras. Sí estoy seguro de que no lo hizo con mala intención, que ganar este Mundial le dio una inmensa alegría y reaccionó así, pero no lo veo como una agresión, como algunas personas están diciendo», sostiene el dirigente granadino.
José Manuel Molina Maza mantuvo su defensa de Rubiales en su labor profesional. «Yo siempre he estado con él, con la labor que está haciendo al frente de la Federación, y todos queremos escucharle en la asamblea», concluyó.
Silencio institucional
El presidente de la Real Federación Española de Fútbol vive sus horas más difíciles en el cargo a raíz de su polémico beso a la futbolista Jennifer Hermoso durante la celebración del Mundial logrado por España el pasado domingo, así como los gestos mostrados en el palco de autoridades, echando una mano a sus genitales cuando acabó el encuentro en el que España se impuso a Inglaterra por 1-0.
Mientras el fantasma de la dimisión o el cese ronda por las oficinas de Las Rozas, donde está la sede de la RFEF, las instituciones de la provincia granadina no se mojan públicamente al respecto y guardan silencio sobre un asunto que se ha colocado en el centro de la diana política y social a nivel nacional. Los responsables de Deportes en la Junta de Andalucía y la Diputación Provincial declinaron realizar declaraciones a IDEAL acerca de la situación del mandatario motrileño.
Fuentes relacionadas con ambas instituciones afirmaron que no van a llevar a cabo ningún tipo de valoración oficial por el momento. En la tierra de Rubiales las posturas fluctúan entre la defensa y el silencio.
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