El Barça no remata la Liga

Y es que el partido fue desde el arranque un choque de trenes. Barça y Betis no entienden de medias tintas y los dos salieron a morder arriba a su rival. Los culés lo hicieron sin Raphinha, con descanso pensando en Dortmund, y la apuesta cuajó en el inicio gracias a un tanto de Gavi que culminó una jugada coral en la que Ferran Torres fue clave apareciendo entre líneas. Fue la antesala a un ida y vuelta en el que los de Pellegrini respondieron de inmediato con un empate en la cabeza de Natan a balón parado y varios contragolpes que hicieron que los azulgranas dudaran en su presión adelantada.

Fue la consecuencia de un primer acto en el que los azulgranas tuvieron el dominio, pero en el que convivieron con la amenaza permanente de Antony, un quebradero de cabeza para la defensa adelantada de Flick. El brasileño demostró una y otra vez que poco tiene que ver con el futbolista que abandonó Mánchester y mantuvo a raya a un Barça que fió sus opciones a Lamine Yamal. El canterano fue el único futbolista del tridente ofensivo capaz de generar desequilibrios a un rival ordenado y de sus botas salieron dos ocasiones que pudieron desnivelar el encuentro antes del descanso.

Tras la reanudación, el Barça mejoró en la circulación gracias a una mejor versión de Pedri y el Betis se vio obligado a recular. Koundé tuvo la ocasión más clara pero se topó con un inspirado Adrián y Flick optó por renovar al equipo de cara a la recta final. Entraron Eric García, Raphinha, Gerard Martín y Fermín, pero los culés no tuvieron su mejor noche y se enredaron en la búsqueda de un último pase que nunca llegó y que deja a los de Hansi Flick con la sensación de haber dejado vivo al Real Madrid.