Primer descenso del 'Fundación' en su historia y quinto granadino
Liga Endesa ·
El Covirán padece la cara amarga del deporte tras cuatro ascensos y Granada pierde la ACB tras hacerlo tres veces el extinto CB Granada y en una ocasión más el Oximesa
El baloncesto granadino ha sufrido cinco descensos desde la máxima categoría a lo largo de la historia. El Fundación CB Granada ha recibido el primer ... revés en su existencia de trece temporadas. Una trayectoria que ha vivido sobre todo momentos de alegría y euforia, con nada menos que cuatro ascensos en solo una década.
La actual entidad del deporte de la canasta local protagoniza la quinta decepción desde la ACB. Lo hace como Covirán, patrocinador que da nombre al equipo que cae desde la Liga Endesa a la Primera FEB, y después de competir durante tres ejercicios en la cúspide bajo la denominación de Club Deportivo Granada por el Baloncesto. Así, la Fundación CB descartó la opción de convertirse en sociedad anónima deportiva, para inscribirse en la Asociación de Clubes de Baloncesto como club, proceso ejecutado en 2022 para militar en la élite.
El Fundación Club Baloncesto Granada se fundó en 2012 y tras recoger el testigo que dejó el desaparecido Club Baloncesto Granada. Óscar Fernández-Arenas tomó las riendas del nuevo proyecto, con plena confianza en Pablo Pin para asumir la dirección técnica, y cubrir así el vacío que dejó el 'Cebé'.
El FCBG ascendió desde la Primera División Andaluza (la también llamada Primera Nacional) a la Liga EBA en el primer curso, temporada 2012/13, en una reñida eliminatoria contra el Baza, empatada a un triunfo y que le dio el éxito por el 'average', al perder por cuatro puntos fuera, pero ganar en la cita inicial de la capital granadina por siete.
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Al Covirán le desciende el campeón
La alegría en el debut siguió en la siguiente campaña, la 2013/14, porque, aunque quedó cuarto clasificado en la Liga EBA y no subió, se hizo con el título de campeón de la Copa de Andalucía frente al Morón.
La felicidad fue completa en la tercera campaña en activo, la 2014/15, con el segundo ascenso, esta vez a LEB Plata, en Albacete. Dos campañas en esa categoría demostraron muchas aspiraciones. En la 2015/16 quedó cuarto finalmente, siendo eliminado en los 'playoffs' de ascenso, en cuartos, por el Ávila: 0-2.
No obstante, se mantuvo el rápido crecimiento a la siguiente, la 2016/17, al acabar ya tercero. Ganó por 3-0 a Navarra en el primer 'playoff' y se quedó más cerca del éxito, al quedar fuera en una dura semifinal contra el Zornotza: 2-3. Aquí se fijó en David Iriarte, el que fuera posteriormente gran capitán de los granadinos, y que hizo un roto con sus triples en el Palacio. El curso fue muy satisfactorio, al anotarse también la Copa de la categoría contra el Alicante.
El tercer ascenso llegó en el curso 2017/18, en concreto el 14 de mayo de 2018, en Pamplona, a la LEB Oro. El éxito fue en cancha navarra y también lejos de la afición granadina, como los de Baza y Albacete, cuando el equipo ya se había instalado en el Palacio de los Deportes después de unos inicios en el modesto pabellón Veleta del Zaidín.
La progresión fue meteórica y, en el estreno en LEB Oro –la segunda división nacional–, logró un octavo puesto meritorio, disputó las eliminatorias de ascenso y cedió, por 2-3, ante el Bahía San Agustín de Mallorca.
Otro momento delicado
El siguiente ejercicio, 2019/20, fue el peor de juego y resultados de su historia. Muchas derrotadas, prácticamente todas, en las salidas, y un momento crítico y peligroso, con la amenaza del descenso a Plata. Sin embargo, con el Covirán decimotercero y la soga al cuello, hubo un hecho insólito: la pandemia, lo que suspendió la competición y anuló los descensos. Esa salvación tan positiva, por factores externos como fue el coronavirus, aquella fortuna, se tradujo en mala suerte a la campaña siguiente.
En la 2020/21, el club rojinegro confeccionó una gran plantilla y desplegó un baloncesto brillante que le llevó a ser subcampeón de la liga regular, incluso terminó campeón de la segunda fase, lo que le hubiera otorgado el billete directo a la ACB de no ser otra temporada anormal, de reajuste tras la crisis sanitaria, en la que solo hubo un ascenso en vez de dos.
Pasó la primera criba aunque con apuros frente al Real Murcia (2-1), también se impuso al potente y físico Coruña (2-1), pero, en la final, con todo a favor, se le escapó el ascenso en el Palacio frente al Río Breogán. Los granadinos se adelantaron por 1-0 y Lluís Costa tuvo la prórroga en un triple suyo en el Pazo dos Deportes de Lugo, pero, con 1-1, para el tercer y decisivo asalto, sin público por el virus y con el Palacio vacío en sus gradas, muchos jugadores de la plantilla nazarí se contagiaron y, mermados físicamente, sufrieron un varapalo sonrojante desde el salto inicial.
Al siguiente campeonato, el Covirán consumó el ascenso, el cuarto del club en su corta historia, éste a la Liga Endesa, en una campaña impecable, en la que superó al gigante Estudiantes y al coloso Girona con Marc Gasol en sus filas. Los granadinos quedaron subcampeones de Copa en Madrid aunque se llevaron el mejor premio. Y por primera vez disfrutó el éxito en casa, en un Palacio abarrotado y con antelación, toda una fiesta para arrasar al Almansa del minuto uno al 40.
En poco más de una década, el Fundación alcanzó la cúspide y recuperó la ACB perdida por el 'Cebé' de Trifón Poch, Curro Segura y Miguel Ángel Zapata, y que José Julián Romero dejó en manos de los 'enterradores' Ramiro Pérez de la Blanca y Julián Aranda. Ahora cae al lado oscuro tras tres temporadas de lujo ACB.
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