La Junta confinará una clase si es necesario y las mascarillas serán obligatorias desde los 6 años «si no hay grupos de convivencia»

Imbroda ha explicado que la idea en Andalucía es que los colegios abran «con normalidad» y sujetos a las directrices que marquen las autoridades sanitarias, toda vez que ha explicado que desde que se decidió el cierre de las aulas por la pandemia, Andalucía ha experimentado una serie de pruebas intermedias, como la selectividad o el refuerzo estival «que, siguiendo las directrices sanitarias, nos ha permitido comprobar que es posible».

Ha insistido en que si hay una sospecha de sintomatología, serán los sanitarios con los que contacte el coordinador Covid los que determinarán cómo proceder, siempre en contacto con los padres, mientras que la decisión de confinar una clase llegado el caso corresponde a Salud y dependerá de los grupos de convivencia escolar también en los que haya tenido presencia el positivo.

«Tratamos de minimizar todos los riesgos de posible contagio dentro de cada colegio, y cada colegio es un universo, es la manera de acotar al mínimo el riesgo», ha abundado Imbroda, que ha desvelado que el viernes habló con la ministra del ramo, Isabel Celaá, sobre el arranque del curso «tratando de alinear posiciones», así como espera que el Gobierno central organice a final de mes «una especie de conferencia específica de la vuelta al aula».

Imbroda ha explicado que el 1 de septiembre se incorporarán los profesores y el 10 comenzará el curso, y que la idea es que todo el personal, docente y no docente, se someta a un test de Covid antes de que los alumnos se incorporen, «unos 150.000 profesionales en Andalucía que conlleva una logística muy compleja».

«Tenemos determinación de abrir las aulas a partir de septiembre con todas las directrices sanitarias«, ha insistido Imbroda, que ha explicado que el uso de la mascarilla no será obligatorio hasta los seis años y, a partir de esa edad, lo será «si no hay grupos de convivencia».

En cualquier caso, ha matizado que en educación «la casuística es tan grande y la tipología de centros tan dispar que hay que adaptar las directrices sanitarias a la realidad de cada centro educativo«.

El consejero andaluz del ramo ha hecho hincapié en que los docentes no son sanitarios y ha asegurado que el Gobierno andaluz va a acompañarles «para resolver todas las dudas que puedan surgir en esta situación tan excepcional», toda vez que explica que el mayor temor que tienen estos profesionales son las cuestiones de responsabilidad como saber qué pasa si se da un positivo en un aula, «algo que puede ocurrir porque el riesgo cero no existe en ninguna parte».

«Todos los colegios tendrán un coordinador Covid que estará en permanente contacto con el centro de salud más cercano, y se marcan una serie de directrices para actúe el coordinador y que cualquier incidencia sea atendida lo antes posible», ha explicado el consejero, que ha pedido colaboración a todos, también a los padres para que no lleven a los niños al colegio si presentan algún síntoma que pudiera ser compatible con el Covid.