Los hombres se suicidan cinco veces más que las mujeres a consecuencia de la crisis

La crisis económica ha sido una situación insostenible e insuperable para muchos, tanto, que muchas personas han puesto fin a su vida ante la desesperación. Un estudio realizado por la Universidad de Oxford y la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres de Reino Unido revela que esta gran crisis se asocia con al menos 10.000 suicidios en Europa y Norteamérica entre 2008 y 2010. Los científicos que han realizado la investigación explican que el incremento de los suicidios no se ha observado en todas partes, algunos países han logrado evitar que aumenten, lo que sugiere que la política pública puede mitigar el impacto de las crisis económicas sobre la salud mental y, potencialmente, el suicidio.

Según cuenta la agencia Sinc, plataforma que recoge el estudio, el informe revela que la pérdida de empleo, los embargos de las propiedades y las deudas son los principales factores de riesgo que conducen al suicidio durante las crisis económicas. Lo peor es que la mayoría de los suicidios son una consecuencia de una depresión clínica, pero hasta la fecha no existen pruebas de que los tratamientos médicos puedan proteger ante esta provocación de la crisis. Los científicos que han desarrollado la investigación afirman que estos datos revelan una inminente crisis de salud mental en Europa y América del Norte. En estos tiempos económicos tan difíciles, es fundamental buscar la manera de proteger a los que probablemente sean los más afectados.

Los científicos han calculado que por cada 100 dólares por habitante dedicados a programas que ofrecen asistencia a los desempleados el riesgo de suicidio se reduce en un 0,4%. Austria, Suecia y Finlandia son ejemplos de países donde esta tasa no se ha visto incrementada.

Las crisis económicas siempre invitan a la reflexión, pero con estos datos sobre la mesa, además de reflexión se precisa acción.