El Molino del Cubo de Torredonjimeno pasa a ser municipal tras su expropiación

Una vez que este monumento con cinco siglos de historia ya está inmatriculado a nombre del Consistorio, ya es posible solicitar subvenciones para su rehabilitación a la Diputación Provincial, la Junta de Andalucía y el Gobierno central, a través del uno por ciento cultural.

El alcalde de la localidad, Juan Ortega, se ha mostrado muy satisfecho de que "uno de los edificios históricos más importantes de Torredonjimeno sea por fin propiedad de todos los tosirianos, ya que nunca debería haber estado en manos de particulares".

A partir de ahora, el objetivo municipal es comenzar el proceso para recuperar el inmueble e intentar dejarlo con un aspecto lo más parecido posible al que pudo tener en el siglo XV, según ha informado el Consistorio en una nota. Para ello, ha solicitado asesoramiento a expertos de la Universidad de Jaén como Juan Carlos Castillo, Santiago Jaén o Consuelo Bedmar para que presten asesoramiento en la redacción del proyecto de rehabilitación integral del Molino del Cubo.

"También queremos que estos docentes de reconocido prestigio nos ayuden a crear un plan divulgativo dirigido especialmente a los estudiantes tosirianos, de manera que puedan conocer en profundidad una parte tan importante de la historia del municipio", ha comentado Ortega.

Ha señalado que será un proceso bastante largo de varios años, aunque ha dicho estar esperanzado de poder optar a las subvenciones del uno por ciento cultural del Ministerio de Fomento, que suelen volcarse en la rehabilitación de este tipo de edificios históricos. "Como alcalde, hoy es un día muy importante para mí y estoy satisfecho de haber podido devolver uno de los mayores símbolos de Torredonjimeno al pueblo tosiriano", ha apostillado.

El Molino del Cubo es una infraestructura hidráulica histórica cuyo origen se remonta al siglo XV, situado a dos kilómetros del casco urbano de Torredonjimeno. Se trata de uno de los molinos fortificados de mayor tamaño y en mejor estado de conservación de los construidos por las órdenes militares del sur peninsular.

El molino en sí es una construcción realizada en piedra, de forma cúbica con fuertes muros y dos plantas. El conjunto conserva canalizaciones para el agua y, aunque ya se ha perdido, contaba con una noria que se movía utilizando el agua del arroyo colindante.