Dos de los españoles dados por muertos están vivos

Alberto Pardo llamó a su madre a primera hora de la tarde de este domingo desde Estrasburgo, ciudad en la que reside desde hace un año, según ha informado su madre. Además, en la tarde de este domingo, el joven ha dejado un mensaje en su perfil de Facebook en el que informa de que está bien. "Yo me veo a mí mismo en estos momentos y diría que estoy vivo pero si seguís escribiendo cosas tan bonitas sobre mí, tal vez tenga que morirme para no dejaros mal. Además, si lo dice El País, tiene que ser cierto", ha escrito Pardo.

Jorge Alonso de Celada, por su parte, ha telefoneado este domingo a su mujer para decirle que se encuentra bien, según han confirmado a Efe fuentes familiares. Antes se habían recibido informaciones contradictorias.

Guillermo Alonso, hijo de Jorge Alonso de Celada, ha asegurado hoy que había recibido dos correos electrónicos de su padre el sábado en los que le informaba de que estaba "perfectamente". Según su relato, mandó un correo electrónico a su padre para interesarse por su situación, ya que éste se encontraba de viaje de turismo en París hasta el martes y no había logrado contactar con él tras el atentado del pasado viernes.

En un primer mensaje, recibido el sábado alrededor de las 20.50 horas, Jorge Alonso de Celada le comentó que tenía problemas con su teléfono móvil. "No te preocupes, estoy perfectamente", afirmó.

Tras recibir la respuesta de su hijo, el padre vuelve a escribirle un segundo correo en el que le reiteraba que no se preocupara y le explicaba que se había enterado tarde de los atentados porque "París es muy grande".

El hijo de Jorge Alonso de Celada ha dicho que su padre, que reside en la localidad madrileña de Majadahonda, está alojado en un hotel de París, con el que se han puesto en contacto esta mañana.

Desde el hotel han informado a los familiares de que Jorge Alonso de Celada ha salido a las 11.00 horas de este domingo a dar un paseo.

Además, el hijo ha añadido que una amiga de su padre aseguraba que lo ha visto abandonar el edificio esta mañana, pero desde entonces no habían vuelto a saber nada de él.

La familia de Jorge Alonso de Celada se puso en contacto con el Consulado de España en París, donde trataron de localizar al español y de verificar si los correos electrónicos se han mandado desde la cuenta original.

Sin embargo, esta noche Jorge Alonso de Celada ha telefoneado a su mujer para decirle que se encuentra bien, según han confirmado a Efe fuentes familiares.

Previamente, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, había afirmado desde Turquía que solo está en disposición de confirmar la muerte de Juan Alberto González Garrido.

Ayer la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, confirmó la muerte del español que permanecía ilocalizable tras los atentados del viernes en París: Juan Alberto González Garrido, madrileño de 29 años y residente en la capital francesa junto a su esposa, natural de Ciudad Real.

Según ha declarado un amigo suyo, la mujer de su primo "fue al servicio en la sala Bataclan y cuando salió vio cómo se lo llevaban herido en una ambulancia". Añade que desde entonces tanto ella como su familia habían tratado de localizarle sin éxito alguno a través de los medios facilitados por los organismos oficiales.

Además hay que lamentar otra víctima que tenía la doble nacionalidad mexicana y española: Michelle Gil Jaimes, quien era del puerto de Tuxpan, en el estado de Veracruz (este). Gil Jaimes había ganado un concurso de belleza en 2007 en Tuxpan y era hija de un reconocido empresario local, según publica el periódico 'El Universal'. Un grupo de familiares viajarán el domingo a Francia, donde ella había estudiado en una escuela de negocios, para repatriar los restos a México, indicó el diario.

Escapan del atentado

Por otro lado, dos españolas resultaron ilesas en el atentado contra uno de los bares atacados por los terroristas, que dejaron 132 víctimas mortales en seis puntos diferentes de la capital francesa. Allegados de las españolas han explicado que estas se hallaban en el bar 'Le Carrillon', junto al canal de Saint Martin, en el distrito X de la ciudad, cuando los terroristas abrieron fuego a bocajarro sobre los clientes que se encontraban en la terraza del bar.

Pudieron echarse al suelo y protegerse para no ser alcanzadas por las balas de los terroristas, presuntamente dos, que causaron al menos 14 víctimas mortales en su ataque contra dos cafés en la calle Alibert, antes de proseguir su camino.

El Gobierno analiza la información facilitada por Francia

La vicepresidenta del Gobierno ha presidido hoy en la Moncloa una nueva reunión de coordinación y seguimiento de las actuaciones del Ejecutivo español en colaboración con las autoridades francesas a raíz de los atentados. A la reunión han asistido los ministros de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, y de Interior, Jorge Fernández Díaz, así como el director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz Roldán, secretarios de Estado y responsables de Gabinete del Presidente del Gobierno y de la Vicepresidenta.

Según ha informado el Ejecutivo, en el encuentro se han analizado las actuaciones de coordinación con las autoridades francesas que se vienen desarrollando desde el mismo viernes, y el intercambio de información que se está produciendo entre ambos países desde el momento de los atentados.

Asimismo, en la reunión se ha repasado el orden del día del Consejo de Asuntos Exteriores de la Unión Europea, que tendrá lugar mañana en Bruselas, así como la convocatoria de una reunión extraordinaria de Justicia e Interior, a petición del Gobierno francés, para el próximo 20 de noviembre.

El Ministerio del Interior decidió ayer mantener el actual nivel de alerta antiterrorista en el 4 de una escala de 5, ya elevado pero que tras la masacre de París, se ha reforzado con más vigilancia en "áreas y ámbitos" que el Gobierno no ha querido desvelar por "prudencia".

Tanto la Comisión de evaluación de la amenaza, que ha reunido en el Ministerio del Interior a los máximos responsables de la lucha antiterrorista, como el Consejo de Seguridad Nacional analizaron ayer los datos de los expertos y llegaron a la conclusión de que no era necesario elevar al máximo la alerta, lo que hubiera supuesto la participación del Ejército en los dispositivos de seguridad.