La Puerta Monaita, pintada por dentro y por fuera

Las pintadas y vandálicas han vuelto a aparecer en la Puerta Monaita. «Pero no fuera, que ya había varias. sino dentro del monumento», explican los vecinos. Los residentes en la zona comentan que los actos vandálicos -«porque estas pintadas tienen poco que ver con el arte callejero»- han llegado hasta el interior del recinto nazarí y detrás del portón se puede leer una gran pintada en el muro con la palabra 'monster'. Otra cuestión es el estado de suciedad en el que se encuentra toda la torre. «Hay restos de botellas y de comida que indican que en la zona se hace botellón y todo lo que pillan», señala la portavoz de la asociación de vecinos del Bajo Albaicín, Lola Boloix.

La representante vecinal denuncia que todo el interior está lleno de suciedad pero que al entrar en el recinto de la torre «pueden hacer lo quieran, hasta subirse a la parte más alta y estar lejos de cualquier persona que pueda decirles algo».

Y hay una leve mejoría

Tanto la asociación como algunos residentes de las inmediaciones a la puerta reconocen que el barrio «parece que está algo mejor». Explican que han mantenido reuniones con miembros de Inagra para el tema de limpieza y con la Policía Local para evitar este tipo de hechos: «Y se ha controlado algo más pero no del todo, y preocupan especialmente los espacios más emblemáticos».

Entre ellos, la Puerta Monaita, fechada en el siglo XI, que fue una de las puertas de entradas al Albaicín y una de las piezas fundamentales que forman la muralla Zirí, junto al Arco de Elvira y el Arco de las Pesas.

Los miembros de la asociación vuelven a insistir en la responsabilidad doble de Junta y Ayuntamiento en este tema y la falta de colaboración entre ambas administraciones: «Todo el entorno de la puerta y los jardines afectan al Ayuntamiento; y la muralla como BIC, a Cultura, pero juntos hacen poco».

Proyecto definitivo

La preocupación de que las pintadas sigan aumentando y se siga atentando contra estos edificios ha motivado que el Ayuntamiento vuelva a poner sobre la mesa un proyecto de videovigilancia a través de cámaras para evitar estos grafitis en sitios destacados. Concretamente, la Puerta Monaita es uno de los seis espacios contemplados para protegerlo dentro del sistema de cámaras.

Por el momento, el Consistorio ya ha entregado la documentación necesaria para solicitar el permiso y, actualmente, se encuentra a la espera de que la Comisión de Videovigilancia se pronuncie. No es la primera vez que el Ayuntamiento hace un intento para solicitar cámaras de control en la ciudad. Ya en 2008 hizo un requerimiento para instalarlas en la zona centro y prevenir robos y hurtos en espacios comerciales pero el TSJA tumbó la idea alegando, entre otras cuestiones, que la iniciativa no se ajustaba al entorno histórico y que se podrían vulnerar aspectos relacionados con la intimidad de las personas.

En esta ocasión, desde la asociación confían en que el proyecto obtenga el visto bueno, ya que desde el área de Urbanismo se han tomado las medidas oportunas para salvar algunos impedimentos como que las cámaras tengan sensores de movimiento y graben ante determinados actos y que las imágenes sólo lleguen a la comisaría de Policía Local.