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La Orden de San Juan de Dios, de Granada al mundo para honrar a los pobres

Medio milenio después de que San Juan de Dios comenzara en Granada su atención a los pobres, la Orden Hospitalaria que lleva su nombre ha sido galardonada con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2015

maría ruiz (EFE)

Miércoles, 2 de septiembre 2015, 15:47

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Medio milenio después de que San Juan de Dios comenzara en Granada su atención a los pobres, la Orden Hospitalaria que lleva su nombre ha sido galardonada con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2015, noticia que se ha sumado al quehacer diario en su atención a enfermos y el reparto de comida.

Desde que San Juan de Dios llegó a Granada hace más de cinco siglos y empezó su labor con los más necesitados, la orden que lleva su nombre se ha extendido por más de medio centenar de países para ofrecer asistencia sanitaria, compañía, un plato de comida para el que no tiene y consagrar con cada gesto la labor de su fundador.

En la sede madre de esta organización internacional de cooperación sin ánimo de lucro, la noticia de la concesión del Princesa de Asturias de la Concordia 2015 se ha mezclado con el quehacer diario en el mismo marco granadino en el que empezó a escribirse esta historia de entrega.

"San Juan de Dios llegó a Granada en el 1500 y se le ocurrió atender a las personas más desfavorecidas, con trabajo en calles como Pescadería y, finalmente en el hospital que tenemos en la misma calle siglos después", ha recordado el superior de la Orden en Granada, José Luis Muñoz, que ataviado con su bata recibía felicitaciones en los pasillos del centro hospitalario granadino.

Esta infraestructura, que sirve ahora de hospital, comedor social y centro educativo para niños con diferentes discapacidades, entre otros servicios, es uno de los 350 centros que la Orden tiene repartidos por el mundo y desde los que cada año atienden a más de 27 millones de personas.

La Orden tiene en Granada el hospital de San Juan de Dios, el primero moderno de la historia de Europa que creó el santo y del que salieron las bases de la orden.

"Es un reconocimiento muy importante porque es un reconocimiento internacional a una labor de mucho esfuerzo, después de lo ocurrido el año pasado con el ébola, la labor en países como Sierra Leona. Es un reconocimiento a la labor de 500 años a favor de los pobres, de los necesitados, de los marginados, la misma que seguimos haciendo ahora", ha subrayado Muñoz.

Impacto e impulso

El superior de la Orden reconoce el impacto de la noticia y confía en que la concesión del Princesa de Asturias a la Concordia sirva para mantener e impulsar la apuesta por honrar al pobre de San Juan de Dios, la misma que imitan cada día.

"Estamos en todos los continentes, con especial atención en países en vías de desarrollo. Pero también aquí, para acompañar a los que más nos necesitan y responder al problema de la inmigración", ha recalcado el superior de la Orden en Granada.

Desde las instalaciones del Hospital San Rafael que gestiona la orden, se contempla el inicio de esta gran apuesta por combatir desigualdades, las antiguas instalaciones y el jardín en el que reposan los restos del santo.

Esta entrega a los demás se cobró el año pasado la vida de los dos religiosos españoles que murieron afectados por el ébola, aunque la orden también ha prestado su ayuda a las víctimas del terremoto en Perú (2007) o del tifón Yolanda en Filipinas (2013), sin olvidar a los más vulnerables de España.

La Fundación Princesa de Asturias ha resaltado que la institución mantiene su eficiencia asistencial con la actualización constante de las estructuras y el impulso a la investigación y formación sanitaria y social.

Hoy, algo al margen de las deliberaciones y los reconocimientos bien acogidos, los empleados y voluntarios del centro en el que germinó todo este trabajo, han seguido sirviendo platos de comida, limpiando el centro escolar que abrirá en unos días y ofreciendo el consuelo a los que nada tienen para imitar la vida dedicada a honrar a los pobres de su fundador.

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