El Prado, hasta el mínimo detalle
Google fotografía 14 obras maestras de la pinacoteca madrileña y muestra con asombrosa claridad matices de las pinturas que resultan invisibles al ojo humano
DANIEL ROLDÁN
Miércoles, 14 de enero 2009, 11:12
El Museo del Prado abre sus puertas al universo digital. Gracias a Google España, la pinacoteca madrileña se convierte en la primera del mundo ... en exhibirse en este formato al mostrar 14 de sus obras estelares a través de la red y con una nitidez asombrosa: 1.400 veces mayor que la que se obtendría con una cámara digital de 10 megapíxeles. Por primera vez, los detalles más nimios de las grandes obras de Rubens, Velázquez y Goya, entre otros maestros, se podrán ver en alta resolución y desde la pantalla de un ordenador a miles de kilómetros de la 'milla del arte' madrileña.
La iniciativa surgió en la delegación española del buscador más usado en el mundo. El director del museo, Miguel Zugaza, consideró que este proyecto iba a universalizar un poco más al Prado, además de darle una mayor singularidad con respecto a otros centros artísticos de primera línea.
El proceso comenzó con la mayor discreción en mayo del pasado año, cuando un equipo fotográfico de última generación empezó a tomar instantáneas de las obras.
Con nocturnidad y durante tres meses, los expertos midieron y plasmaron cada cuadrícula en la que estaban divididos los 14 cuadros. En total, se realizaron unas 8.200 fotografías de los lienzos.
Después, se utilizó la tecnología de Google Earth (el sistema cartográfico) para lograr un asombroso acercamiento a las obras. De esta manera, cada uno de los cuadros se convierte en una capa más del programa, como pueden ser las imágenes de cualquier calle o casa.
«Tributo a los maestros»
Zugaza consideró esta herramienta «un tributo a los grandes maestros», ya que se van a apreciar las pequeñas sutilezas de sus creaciones, los trazos y pinceladas de cada artista, los dibujos subyacentes, los craquelados del barniz y otros muchos aspectos difíciles de advertir en la contemplación directa. Se puede contemplar, por ejemplo, una pequeña cicatriz del lienzo en 'Las Meninas'. Y por supuesto, Zugaza apuntó el aspecto didáctico de esta nueva herramienta: «Cualquier profesor, alumno o aficionado al arte podrá escrutar las obras desde cualquier lugar del mundo», proclamó.
Con esta inmersión en las nuevas tecnologías -con coste cero para el Museo, mientras que Google no ha querido desvelar la inversión realizada en el proyecto- se abre un nuevo campo para el futuro de las pinacotecas, y también nuevos interrogantes. ¿Estarán en el futuro todas las obras de arte en la Red? ¿Será cosa del pasado acudir a un museo a admirarlas 'en vivo'? Zugaza consideró que ambos mundos son compatibles y están interrelacionados. «Nada puede sustituir a la sensación de contemplar directamente un cuadro», sentenció el director del Prado.
Por su parte, el director de Google España, Javier Rodríguez Zapatero, apuntó que esta iniciativa «seguramente» va a colmar la curiosidad de «aficionados y turistas» y que constituye un paso más en el afán del buscador de «democratizar la información».
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