La UDA se sienta a la espera de la mejor oferta para mover su mercado

 Mohamed El Assy (CEO del club rojiblanco) ya dijo, en la presentación de Luis Suárez, que el Almería estaba en disposición de poder subir su presupuesto y, de esta manera, el límite salarial si lograba realizar alguna de las ventas que, con ofertas en la mano, podrían desarrollarse en este mercado de invierno. Eso sí, también indicó, a continuación, que todas ellas eran inferiores a lo que la entidad presidida por Turki Al-Sheikh consideraba que era el 'precio justo' por esos jugadores en cuestión.

Pero los días han pasado y el mercado, por ahora, se está moviendo con operaciones en diviesos clubes que están haciendo que el dinero 'cambie de manos' y, por tanto, los que obtienen esa plusvalía monetaria tengan la necesidad de realizar fichajes para 'tapar' los agujeros dejados por los futbolistas que se han ido de un determinado vestuario.

Esto es lo que sigue esperando el Almería. Con la tranquilidad que le da el hecho de no tener ni la obligación ni la necesidad de vender, porque siguen teniendo margen salarial, los del Power Horse Stadium se encuentran en una fase en la que están de 'objeto pasivo' mientras que llegan a su puerta los ofrecimientos que se acerquen a lo que realmente quieren para dar el visto bueno a alguna operación.

El primer movimiento de salida servirá para inscribir a Diego Mariño. El Almería tiene hasta el martes para hacerlo. Salvo que ocurriera algún contratiempo en el entrenamiento de hoy, último antes del encuentro de mañana frente al RCD Espanyol, no hay «necesidad» de tener que dar una baja para inscribir al gallego, al estar disponibles tanto Fernando Martínez como Diego Fuoli. Mariño ha llegado a un acuerdo para vestir como rojiblanco almeriense lo que resta de campaña, la próxima y una tercera que es opcional por parte del club, salvo que llegue a un número de partidos que, entonces, sí será ejecutada por el propio guardameta que lo fuera, hasta el martes pasado, del Sporting de Gijón.

Los almerienses, para darle el '1' a Diego Mariño, están a la espera de que, de una vez, el representante de Fernando Pacheco llegue con la oferta que el Almería lleva esperando desde que, en noviembre, el guardameta extremeño dijo por primera vez que tenía intención de abandonar la disciplina de la UDA. Pasados ya algo más de dos meses, todo sigue 'igual'. La diferencia, que desde la parte de Pacheco han visto la postura firme y de fuerza del club, mientras que desde la entidad han visto que nada ha cambiado en el pensamiento del que fuera baluarte del Deportivo Alavés en temporadas anteriores.

Todo sin olvidar que la intención del Almería era la de firmar un centrocampista. El nombre que salió fue el de Gonzalo Escalante, presentado ayer como nuevo jugador del Cádiz. Por lo tanto, la dirección deportiva sigue 'peinando' el mercado. Aunque se ha producido, en las dos últimas jornadas, un hecho que, hasta este momento, no se contemplaba porque el rendimiento no había sido el óptimo. Samú Costa ha demostrado que, tras los entrenamientos desde el parón por el Mundial, puede jugar de pivote por delante de la defensa. Una circunstancia que ha podido cambiar la idea del cuerpo técnico, al no estar ya como único especialista, para dicha demarcación, César de la Hoz.

Esta operación, como cualquier otra que no sea la del portero, dependerá exclusivamente de los movimientos de salida del Almería. Siempre que se produzcan porque, por ahora, el club rojiblanco sigue a la espera de que 'lo llamen'.