Racing de Ferrol, otro que llega desahuciado al UD Almería Stadium
El rival. ·
Los ferrolanos salvaron un 'match ball' frente al Eldense y pretenden repetir faena y retrasar su descenso a Primera RFEFJavier Gómez Granados
Almería
Domingo, 27 de abril 2025, 23:56
De los últimos once partidos anteriores a la pasada jornada, el Racing de Ferrol sólo había sumado un empate. Sólo un punto. Todo lo demás ... fueron derrotas, una tras otra. La esperanza, casi completamente desvanecida… hasta hace sólo unos días. Después de meses de perder sin tregua, los gallegos vencieron en la pasada jornada a un rival directo, el Eldense, tomando algo de oxígeno y un poco, realmente muy poco, de esperanza en su milagrosa salvación. Si a eso se une que el rival, la UD Almería, vive momentos convulsos y se atranca en todos los partidos, incluidos en los últimos ante rivales de la zona baja, el rayo de esperanza se hace algo, sólo un poco, más intenso. Aunque el destino de los ferrolanos parece escrito y se pudo sellar, incluso, la pasada jornada. Sin embargo, el gol que el ex de la UDA, Álvaro Giménez, hizo al Eldense (1-0) sirvió para acabar con una racha de 768 minutos sin ver portería y con ello evitar, de forma matemática, su inexorable descenso a Primera RFEF.
Los números del equipo gallego en Liga son incompatibles con la permanencia. Sólo han marcado 19 goles en 36 partidos. El peor, de lejos, en esta suerte. De hecho, la UDA, con 60, retrata bien a las claras la diferencia existente. Eso sí, en cuanto a goles encajados, los ferrolanos, con 56, sólo empeoran en cuatro a los de Rubi, que son de lo peorcito de la categoría en defensa.
Lejos de su estadio, el Racing de Ferrol sólo ha sumado trece puntos, sólo ha marcado nueve goles. Y le han endosado 31.
Dibujo táctico
Para un equipo que está en la situación del Racing de Ferrol el dibujo táctico es lo menos importante a la hora de encarar cada partido. Es más, el aspecto anímico y la autoestima son los aspectos que importan cuando los gallegos saltan al césped. Y es que, con su habitual 1-4-2-3-1, la pizarra de Alejandro Menéndez debería ser suficiente para afrontar con solvencia los partidos. Al menos en cuanto a la teoría. Porque el Racing de Ferrol gusta de la posesión del balón, de mover la pelota de lado a lado, de incluso marcar el tempo del partido. Pero solamente es en teoría. Porque la realidad dicta que los gallegos suelen estar a merced de su rival, más allá de los minutos de posesión del balón. Apenas llegan a dominar alguna fase del juego en cada partido. Más bien muestran abiertamente sus limitaciones ofensivas y defensivas. La ausencia de goles marcados deja en mal lugar a sus delanteros y todo el trabajo ofensivo semanal. Pero es que los errores que cometen en la zaga, de forma continua, llevan a la desesperación a la afición racinguista.
El equipo ferrolano es muy frágil en todos los aspectos, especialmente en el anímico. Eso sí, son profesionales y en su sueldo va competir cada duelo. De hecho, su anterior victoria en Liga fue de mucho mérito, ante el Levante en Valencia (0-1), aunque todo lo que vino después fue extremadamente negativo con una de las peores rachas que se recuerdan y que ha condenado a los gallegos a un descenso más que merecido.
En Ferrol, no obstante, se agarran al mal momento de la UDA y a su fragilidad en los primeros minutos para volver a situarse por delante en el marcador para tratar de gestionar una ventaja que han tenido en otros partidos antes y que no han sabido gestionar con ninguno de los técnicos de esta campaña.
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