Este año, el playoff de ascenso empieza en cuartos para la UD Almería

Hoy, más que nunca, con el primer objetivo logrado –el de estar en la pelea por una plaza en la final y, luego, ganar ese doble duelo–, importan las formas y mucho. Las exhibidas en las últimas jornadas no ofrecen garantías. No sucedería ni aunque fuera el rival más sólido de la competición. Pero sí que es cierto que la actual UDA carece de la solidez necesaria que puede hacer dudar al rival, al de hoy y al del miércoles o jueves próximo con bastantes más cosas en juego. Desde hace tiempo, bien con José Gomes bien con Rubi, hay cosas importantes como la capacidad para ver portería –ha sucedido en los últimos ocho compromisos–, pero también para que sus rivales la vean –siete de los últimos ocho rivales le hicieron daño en ese aspecto–. Por eso, la última semana ha sido para prestar algo de más atención a una tarea que no ha sido mala, en lo global, pero que ha tenido unos defectos para sufrir.

Defender es la clave para los indálicos y sacar la que sería la segunda victoria de la UDA en El Molinón, el tercer partido de los doce que se han jugado entre ambos clubes en tierras asturianas. El primero acabó en tablas y se jugó en el Antonio Amilivia de León. Es, por los resultados, un campo hostil para la UDA, que se encuentra incómodo cada vez que se enfrenta al conjunto asturiano, también en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, al que ganó en la ida sin hacer, eso sí, mejor partido que los indálicos.

Entonces, casi pasó como ahora. El Almería era capaz de hacer ocasiones para ganar cómodamente, pero la no finalización cara al marco rival –hubo tres disparos de gol de Ager Aketxe y uno de Fran Villalba– causó estragos en el 74, cuando Uros Djurdjevic se anticipó a Álex Centelles para rematar un gran centro de Saúl García desde la izquierda y rematar al Almería en el que era el segundo partido de Liga de los rojiblancos, después del muy esperanzador en el Anxo Carro, ante el CD Lugo.

Entonces, como ahora, el más mínimo error pasa fractura a los unionistas, obligados hoy a poner una 'muralla' en defensa que les permita adquirir, hoy sí, sensaciones que, además, ayuden a sumar una victoria que condenaría de paso al Sporting a quedar fuera de la pelea y, para la UDA, ver si acompañan los resultados para ser tercero y tener el factor campo en semifinales y final, que tampoco favorece porque si bien conseguir un resultado idéntico en los dos partidos da la victoria, obliga a jugar un playoff donde los goles del rival valen doble.

Si fuese por 'sensaciones' parece que los de atrás serán los mismos que jugaron el pasado lunes frente al Logroñés, con Iván Balliu y Sergio Akieme, en los laterales, y con Nikola Maras y Chumi por el centro, pese a que el gallego es el que menos minutos ha disputado de todos los centrales, pero jugó frente a Albacete y Logroñés, ante el que fue 'clave' en el gol que hizo sufrir al equipo. En general, hizo un buen trabajo.

Está también claro que otra de las líneas que dio resultado fue la del centro del campo con la aportación de César de la Hoz como único pivote, por detrás de Manu Morlanes y Joao Carvalho. El cántabro siempre ha acudido al rescate, cumpliendo con los motivos por los que Rubi le escogió. Por delante, de nuevo, podrían estar Manu Morlanes y Joao Carvalho. El primero de ellos en un excelente estado de forma como encargado de filtrar balones que son antesala de peligro y el segundo en las ayudas. Lo que sucede es que Rubi avisó el viernes de que podía haber cambios. Uno, jugando fuera, puede referirse a la presencia de Lucas Robertone en lugar del mediapunta portugués. El argentino ha dado un buen rendimiento, cumpliendo con lo que se aventuraba antes de su llegada a la entidad indálica.

Ramazani y Lazo son dos jugadores destacados por su comportamiento con el sanluqueño siendo notable en su aportación en los últimos partidos disputados. Dos jugadores importantes para hacer sociedad con Sadiq Umar.

El Sporting ha sido uno de los rivales más regulares de la competición. Como queda dicho, siempre ha estado en la pelea, de la que se cayó por su empate el lunes en Fuenlabrada, que permitió que Leganés, Almería y Girona consiguieran billete definitivo para el playoff final. Pero no cabe duda que el equipo de David Gallego ha sido uno de los más sólidos, tanto que sus conquistas en dos tercios del campeonato le pudieron haber dado para no salir de la pelea nunca, pero sí es verdad que en las últimas jornadas ha ido perdiendo fuerza de modo que hoy se lo juega todo. La racha de sólo dos victorias en los últimos nueve partidos contrasta con la de diez jornadas en las que sumó 20 puntos sobre 30 jugados.

Ante la UDA es baja segura el centrocampista Manu García, concentrado, como Jorge Cuenca, con la selección sub-21. Mientras, Borja López y Djurdjevic finalizaron el partido en Fuenlabrada con molestias que hicieron temer por su presencia, pero seguro que estarán hoy. Sin embargo, tendrá algo diferencial con respecto a la UDA como es la de unos cinco mil espectadores en las gradas, algo de lo que la UDA no podrá disponer y de lo que se quejó, con justicia, Rubi el pasado viernes, que sabe que este año el playoff se juega desde los cuartos de final.