Verdad accidental

Bromas aparte, el partido tenía muchos alicientes. La vuelta de Francisco a su casa, el estreno de Vicente Moreno, la ilusión que genera ver las caras nuevas y, con lo que eso conlleva, ver cómo el equipo confeccionado por la dirección deportiva de la UDAlmería reacciona a las bajas que han sido muchas y todas importantes.

El partido que inauguraba el nuevo ciclo liguero comenzaba como se esperaba, mucho calor abajo en el verde y mucha preocupación por no cometer errores, errores que llegan del minuto 20 al 28 y que condenan al equipo indálico por cometer dos penaltis bien señalados y que son un poco para mirárselo a estas alturas. Ya sabemos como son las reglas y las reglas están bien aplicadas.

A partir de ahí, la UDA, como era obvio y/o evidente, se lanza a por el partido o a hacer un gol rápido. Fruto de ese ímpetu la tiene muy pronto. Luis Suárez se aprovecha de una jugada 'maradoniana' que atajó Dimitrievsky para demostrar ¡qué importante es tener un portero de tanto nivel!

Acabó la primera parte y la segunda empezaba con la inclusión del ilusionante Arribas y los picotazos de Ramazani, mención aparte merece el belga, que de seguir este nivel estaríamos hablando del Ramazani que esperamos. Con el partido de ayer los 15 millones que se escuchan del Real Betis se quedan cortos.

El Rayo, bien juntito y a defender la renta, típico de los equipos de Francisco cuando tienen ventaja y más aún cuando esa ventaja es de dos goles y tu rival no aprovecha las ocasiones que tiene.

Tocaba esperar milagro y no llegó. Vicente contó con Marezi, buena pinta de futbolista, pero démosle tiempo y esperemos, era ir con todo y el de Massanasa, lo intentó.

En definitiva, se puede hablar de buena partido de la UD Almería, pese a la derrota. Ahora toca sacar conclusiones, coger lo bueno y aprender de los errores y que cuando se cometan, no queda más remedio que reconocerlos, admitirlos, aprender de ellos y olvidarlos.