Todo lo que le puede salir mal le saldrá mal

La inseguridad defensiva que hubo con Vicente Moreno apareció con Garitano, que sí parecía haber frenado la sangría. Pero ante la Real volvió a evidenciar los problemas que tiene, especialmente a balón parado.

La derrota azuzó a un Almería que vivió sus mejores minutos del partido y se empezó a desplegar de nuevo. Fruto de eso llegó la acción del gol, no menos criticable es la acción de antes del remate de Arribas. ¿Alguien ha visto el disparo de Lázaro antes del gol? En fin... no seré yo quien analice eso porque parece que nadie se dio cuenta de que ese remate no es precisamente de un jugador que pide la titularidad y que quiere salvar la categoría.

En el vestuario ya saben lo que es ser el colista de la categoría. Con 1-1 en el marcador, la acción de Le Normand y Ramazani es un penalti como una casa pero fruto de esa posición, la última, ya saben lo que son las decisiones y es que inmediatamente después sí señala la pena máxima de Sergio Akieme, un penalti que según quien sea el dueño del brazo se pita o no se pita.

Dicho esto, la UD Almería todavía está viva en la competición, no por sensaciones ni por juego, pero si por números y ya lo explicó Juanjo Aguilera días pasados en IDEALcuando habló de que la presente será seguramente la salvación más barata de la historia de la categoría y ahí señores, nos guste o no, el equipo está vivo.

Como dice Zig Ziglar en dos de sus citas «no tienes que ser grande para comenzar, pero tienes que comenzar para ser grande» o aquello de que «lo importante no es la situación, es si nuestra reacción es negativa o nuestra respuesta es positiva».