Amigo, el ratón del queso
«La suerte, los estados anímicos, la confianza son primordiales y es que en este caso por nombres y por plantel... hay mimbres»
Pedro Martínez
Almería
Sábado, 7 de octubre 2023, 23:19
Esperar y esperar y esperar. No queda otra. Sé que el discurso cansa, pero los puntos están ahí.
El técnico que venga tiene que sacar ... partido a una plantilla confeccionada para no pasar apuros... claro que eso era en el mes de agosto, ahora ya todo son urgencias y todo lo que pase es peligroso, como peligroso es ver a Koné, un nueve firmado para hacer olvidar lo poco pero bueno que dio El Bilal Touré, como ver a Baba para hacer olvidar a un Samu Costa que anduvo perdido en el último tramo y poco pendiente de lo que pasaba en el campo, a un Arribas que no se puede contagiar de lo que el equipo está pasando, pero que es normal, ya que esta dentro de ese vestuario, a un Maximiano que venía o viene para que el equipo tenga un poco más de seguridad que la que teníamos el año pasado y digo un poco porque me parece curioso este caso. Yo aquí me mojo y soy de los que opina que me parece un cambio como el de Vicente del Bosque y Carlos Queiroz en su día, ¡Ojo! Es una opinión personal, ya que Fernando Martínez demostró el curso pasado y con creces estar a la altura de la competición y con creces.
Tienes ahora un parón largo y la sensación del que el míster que venga verá dónde y qué se puede cambiar y es que hasta diciembre tendrá que tirar con lo que tiene, que no es poco.
En esto del fútbo,l la suerte, los estados anímicos, la confianza son primordiales y es que en este caso por nombres y por plantel, como decía al principio, hay mimbres. Quizás sea más psicológico que otra cosa o de suerte de que la pelota entre como no lo hizo en Villarreal o de la que la pelota no entre como entró en el partido ante el Granada.
El éxito de un equipo, insisto, radica en que confluyan en él energías positivas de todos los ámbitos. No sólo cuenta la preparación física o táctica, también la aportación de directivos, periodistas, aficionados... Cuando confluyen los valores individuales con los colectivos hay un progreso. De lo contrario, no se sigue por el buen camino». Eso era lo que decía Óscar Cano sobre el modelo de juego del FC Barcelona.
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