El Oviedo busca otra oportunidad para el ascenso

Dibujo táctico

El esquema táctico con el que afrontan los de Javi Calleja la mayor parte de los partidos es el 1-4-2-3-1 que, hasta el pasado fin de semana, también utilizaba su próximo rival, una UDA que, visto lo visto, será sustituido por un 1-4-4-2 que tan buen resultado le dio. Sin embargo, a los asturianos sí que les cuadra ese esquema con doble pivote y tres creadores en una línea anterior al delantero centro. Y ello, principalmente, porque sí les funciona muy bien –desde luego mejor que a la UDA– su proceder defensivo. Fuertes, aguerridos, solidarios y sacrificados, los azulones saben que el principio de todo, al menos en Segunda División, está en una buena defensa. Y la practican. Desde el hombre punta hasta el último zaguero, todos trabajan esta faceta del juego que, consecuentemente, les libera a la hora de atacar donde la velocidad y la habilidad individual juegan un papel importante.

El cuadro asturiano trabaja mucho y bien el juego aéreo en las dos áreas. Por ello, los laterales de largo recorrido cobran vital importancia para colocar balones al punto de penalti. También los hombres de la medular que, abiertos a los costados, buscan el uno contra uno y los centros al delantero de forma constante. El juego directo, en todo caso sencillo, aunque basculen algo de lado a lado, forma parte de la puesta en escena de un Oviedo perfectamente adaptado a la idiosincrasia de la Liga Hypermotion.

A pesar de todo lo dicho o quizás por ese afán defensivo, el Oviedo tiene serios problemas para marcar gol. Es de los equipos que menos consiguen, sólo seis. De ellos, tres en casa en otros tantos partidos. Eso sí, conceden poco atrás, siendo uno de los que menos reciben (7).