«Parece que venimos predispuestos para lesionarnos»

El barcelonés, sí es cierto, recuperará a Michel Macedo para la banda derecha, pero la sesión de ayer dejó dudas sobre si Quique González o Casto llegarán para la cita en Santo Domingo para enfrentarse al Alcorcón de los exrojiblancos Nelson y David Rodríguez. El primero no apareció por la sesión con molestias, lo hizo casi al final acompañado por el doctor Morates y para hablar, a la conclusión del entrenamiento, con Joan Carrillo. El segundo se fue antes de que comenzara el partidillo donde el técnico exteriorizó su malestar.

Avisos constantes

El entrenamiento de ayer fue de continuos avisos. Ya comenzó con una sesión de vídeo en el que hubo análisis que será bueno para tenerlo en cuenta el domingo frente a un rival que ha dado cal y arena en sus dos últimos partidos, pues ganó en casa a la Llagostera (6-1) y el pasado fin de semana perdió en Miranda (3-0), pero siendo un resultado engañoso porque en la primera parte tuvo ocasiones para haber puesto el marcador a su favor.

La presión y el juego al primer toque fueron aspectos trabajados en esa primera parte del entrenamiento con balón. Sin embargo, Joan Carrillo no dejó nunca a lo casual la circulación, pidiendo a sus jugadores, de forma continuada, atención al toque, «quiero calidad más que calidad», llegó a decir por momentos, además de que se pensara en la siguiente acción y no en la inmediata, en el contacto.

Posteriormente, el ejercicio fue intenso, trasladado a uno de los fondos del anexo, con dos porterías situadas en escasos metros en los que buscó la intensidad del grupo, a los que 'invitó' a jugar de cabeza, exclusivamente.

Los motivos

El juego a campo completo fue donde el desarrollo del partidillo, primero con acciones a la contra en la que sólo defendían dos jugadores y atacaban todos y posteriormente con trabajo de ataque y defensa para todos, «dentro de unas reglas» -señaló el técnico-, terminó de enfadar al técnico de la UD Almería, que dio por concluido el entrenamiento tal vez antes de lo previsto, porque se había anunciado que la plantilla trabajaría primero en el anexo y posteriormente en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, a puerta cerrada. Avanzada la sesión, en algunas fases dialogó con su segundo, Paco Ruiz, con el que habló en voz baja, llegando a exclamar «venimos predispuestos a lesionarnos», además de no entender algunas de las 'decisiones' adoptadas por algunos jugadores durante la sesión de trabajo.

Lo que 'colmó el vaso', porque la decisión fue causal, llegó tras un balonazo de Iván Sánchez a pocos metros y que fue recibido por Míchel Zabaco en la cara. El central cayó desplomado e inconsciente al suelo, siendo atendido por el doctor Morate, a la par que Joan Carrillo decidió que era la hora de estirar y poner punto y final a la sesión preparatoria.

Y es que la enfermería está ya lo suficientemente cargada como para buscarle más inquilinos. No hay que olvidar que a los habituales Ximo Navarro y Adri Castellano, que ayer trabajaron en su puesta a punto -podrían volver en breve, tal y como se observa por su forma de entrenar-, se unió en Mallorca Sebastián Dubarbier, cuyo periodo de recuperación no está decidido, y Eldin Hadzic, en la previa al partido frente al Valladolid, mientras que esta semana ha sido FranVélez otro de los que espera 'en el consultorio'.

Por lo pronto, con las dudas de Quique González y puede que Casto, aunque ambos podrían llegar para el domingo, al técnico rojiblanco le pueden faltar mimbres con vistas al partido en Alcorcón. Sí es cierto que Carlos Cuéllar y Jonathan Zongo cumplen una semana con el alta médica y los dos apuntan a estar en Santo Domingo para una afrenta importante.