Música rojiblanca para la remontada

Pero los hay quienes confían en las posibilidades, por ínfimas que parezcan. Alejandro Valverde, que se encuentra tomándose un café en el Kiosco Amalia, es uno de los optimistas que, aunque lo ve difícil, cree que con un poquito de suerte seguro que se puede lograr, pero que todo pasa por que los jugadores salgan a muerte y no «atontaos» como en la ida. Piensa que la remontada comenzará con el recibimiento que se va hacer al autobús previamente al partido.

De igual forma, ve vital que la ciudad entera haga piña para poder subir y que se sienta el calor de los aficionados. Alejandro, desde pequeño, jugaba más al fútbol de lo que lo veía, pero ahora es al revés: como no puede jugar, lo ve y lo siente plenamente, y al Almería más que a ninguno.

Afianzó su relación como aficionado como muchos otros, con el equipo en Primera en el que militaban jugadores que le dieron muy buenos recuerdos, como Álvaro Negredo. Ahí fue cuando empezó a seguir cada partido. En momentos de pandemia echó mucho de menos el deporte rey, pues al Almería lo ve siempre, «porque es nuestro equipo». Fue una situación «muy aburrida», admite.

Su mejor recuerdo desde que es aficionado del Almería fue el ascenso con Emery. Piensa que algunos no son conscientes todavía de lo importante que sería lograr el objetivo de ascender a Primera División, para la ciudad, para el equipo o el turismo. La otra pasión de Alejandro es el mundo de la música, donde es conocido como Brasi. De hecho, en febrero del año pasado compuso una canción dedicada al conjunto indálico, pero que finalmente no se ha publicado hasta ahora, porque quiso esperar «al momento preciso», además de que justo llegó la covid para interponerse en su lanzamiento.

Esto surgió con la idea de intentar llevar a cabo algo ajeno a lo que solía escribir, sobre sí mismo y sus relaciones. Pretendía hacer cantar sobre el Almería y regalárselo a la afición y al club «para que lo disfrutaran». Intenta transmitir unidad, habla de los dolores de la afición, del equipo y la ha sacado justo para los play-off para ver si animaba a todos a subir. Algo que, si sucede, celebrará «con una cervecilla, como lo haría cualquiera».