Jugadores del filial del Almería, al servicio del escudo

A ellos, se unen los otros cuatro jugadores con más proyección de la cantera, si bien la presencia de Jero Lario responde más a la obligación de contar con un tercer portero al que echar mano para solventar cualquier contingencia que pudiera surgir en ese futurible espacio de tiempo en el que el fútbol podría volver a aparecer con cierta normalidad. Los cuatro tienen poca experiencia en el fútbol profesional, pero mucha en las categorías inferiores, en las que han dejado la impronta de una capacidad que, con la juventud como añadido, les coloca en la mejor posición para tener oportunidades.

José María Gutiérrez ya sabe de qué 'material' están hechos los seis, los dos que trabajan y juegan con el primer equipo, y los otros cuatro jugadores que han hecho una excelente temporada en el Tercera División, a pesar de no haber podido lograr el objetivo de luchar por el ascenso a Segunda División B, como era el propósito, perseguido. Lo cierto es que al equipo rojiblanco tuvo un mal arranque, fruto de la una plantilla a todas luces corta con la que Esteban Navarro sacó todo lo que pudo. La llegada tardía de refuerzos dio opciones y de hecho estuvo en puesto de playoff, pero tropiezos puntuales le hicieron caer a la quinta posición y quedarse sin opciones como consecuencia de la suspensión de la competición.

El lorquino Jero Lario (7-2-1995) supone la presencia de un jugador con veteranía bajo palos que en la pasada temporada, con el Almería B en Segunda División de B, tuvo destacadas actuaciones. Ágil bajo palos, con buenos reflejos y seguro con los pies, llegó a la UD Almería la pasada temporada, tras haber en el Celta. En sus dos temporadas en el equipo rojiblanco, Jero ha estado en cuatro convocatorias. En la pasada temporada estuvo en los partidos disputados en Pamplona y Málaga, y en la presente temporada también estuvo en Málaga y ante el Dépor, en el último partido antes del confinamiento. Con el filial, disputó 1.260 minutos el año pasado, con 14 partidos como titular en Segunda B. En el curso presente, fue titular en 26 partidos, acumulando 2.340 minutos en Tercera División.

El nijareño (15-5-1998) es un jugador que ha mamado los colores de la UDA. Sub-23, es un jugador que ha demostrado su capacidad para estar en el primer equipo en varias ocasiones. Se trata de un futbolista de esos que le gustan a los técnicos, por su versatilidad, ya que puede jugar tanto en el centro del campo como en el centro de la defensa. Últimamente lo viene haciendo ahí, lo que supone también una buena salida de balón en estos tiempos modernos, en el que se le exige el toque hasta a los porteros. Ya ha debutado con el equipo a temprana edad, pues lo hizo con 18 años de la mano de Luis Miguel Ramis, ante el Zaragoza y volvió a jugar con Lucas Alcaraz en Reus, una temporada después. Con el filial, lleva los galones de capitán, por el brazalete pero también por sus características. En el Almería B desde la temporada 2016/17, su mayor aportación ha llegado en las dos últimas temporadas, en las que ha sido titular en 48 partidos –28 en la 2018/19 y 20 en la 2019/20–, con 4.261 minutos disputados.

El parón no le ha venido nada bien al cartagenero Dani Albiar (8-1-2000), que debutó con el primer equipo en el duelo frente al Elche, aquel partido marcado por la expulsión de Darwin Núñez, y también jugó en el partido de Copa en Tamaraceite. Es un jugador de cantera, con siete años en la UDA, donde lleva desde la 2013/14 habiendo jugado en categorías infantil, cadete, juvenil y senior. En la 2017/18 jugó 81 minutos con el Tercera y siempre ha ido de menos a más. En la 2018/19, disputó 740 minutos con el Segunda B, siendo titular en 9 de los 20 partidos en los que estuvo. En la presente temporada, este talentoso jugador, paciente y con excelente visión de juego, ha sumado 1.755 minutos en 24 partidos, de los que en 23 ocupó plaza en el once inicial.

El barcelonés Rubén Enri (10-4-1998) es un delantero de esos a los que se le caen los goles de los bolsillos. Lo demostró en su etapa en el Reus, de la que Miguel Ángel Corona e Ibán Andrés tuvieron suficientes muestras para traérselo para un proyecto que, de no haber sido el 'pomposo' de la actualidad ya le habría aportado al ex del equipo reusense muchos más minutos en Segunda División que los exiguos 6 que lleva –los disputó en el último partido de 2019, frente a la Ponferradina–. En el filial ha sido crucial su aportación para que este soñara con haber jugado por el ascenso a Segunda División B, pero la fortuna no ha estado de su lado y la cancelación del campeonato le ha impedido seguir su grandísima progresión. Máximo goleador, ha puesto la firma a 24 de los 60 goles que hizo el equipo de Nandinho –máximo goleador del grupo, ex equo con el Linares– en sólo 13 partidos. Pero se entretuvo en meterle cuatro al Atlético Porcuna (6-0), tres al Vélez (2-3) y otros tres al Loja (4-0) y dobletes frente al Huétor Vega (2-1), Mancha Real (4-0), Poli Almería (1-3) y Vélez (3-1). Antequera (1-1), CD El Ejido (1-0), Alhaurín (1-3), Malagueño (0-3), Torreperogil (2-0) y Motril (1-0) también cataron la letalidad de un delantero que tiene futuro y puede tener minutos.

El británico de origen holandés Arvin Appiah (5-1-2001) tiene que justificar su altísimo coste. Conforme han pasado las jornadas, ha demostrado ser un jugador con mucha velocidad al que le falta explotar. Ha disputado 481 minutos en los 13 partidos en los que fue alineado, estando presente en las convocatorias de 21 de los últimos 23 partidos disputados y los 120 minutos del partido frente al Tamaraceite. Ha tenido fases, durante los minutos disputados, en los que se ha mostrado como un jugador interesante. Lo que la UD Almería pagó al Birminghan 'asegura' que es un futbolista para tenerlo en cuenta.

En Iván Barbero (17-8-1998) hay muchas ilusiones depositadas. El almeriense, cedido por Osasuna, es un jugador hecho a la par por los dos equipos con los que ha jugado. Se hizo en las bases del conjunto indálico, donde destacó haciendo muchos goles e, incluso, como juvenil llegó a jugar en el primer equipo. En Osasuna Promesas también vio puerta con asiduidad despertando las intenciones rojiblancas de recuperar sus servicios. Ahora no ha tenido demasiada presencia. Llegó en el mercado de invierno y eso supone un hándicap por el poco tiempo para adaptarse y las necesidades de hacer cosas. Sólo ha disfrutado de 17 minutos, casi la mitad (8) en Soria y los otros minutos frente al Fuenlabrada. Ahora, con este parón de dos meses, puede que esté en las mismas condiciones que el resto de compañeros y, sin duda, con posibilidades de demostrar que tiene gol. Eso no se olvida nunca.