José María Gutiérrez mira a que el Almería gane; «queda mucho»

Lo único cierto es que mañana, desde las 20.00 horas, la UD Almería se enfrenta a un rival que, más allá del lugar de 'procedencia', acumula sólo tres puntos menos que los indálicos y que, por tanto, será un rival complicado, un equipo que ha desterrado, con sus formas, el apelativo de ser un equipo revelación para pasar a ser una realidad. «Yo creo que ya no es una revelación, es un equipo que opta para meterse en los puestos de arriba», dijo el torrejonero.

Y, para la UD Almería, mirar hacia arriba o hacia abajo no es recomendable en este momento, pues «quedan muchas jornadas y se irá viendo en el transcurso del paso de las jornadas cómo está el equipo y qué equipos están arriba».

El Almería deberá jugar un partido complicado ante un equipo que en casa sólo ha perdido un partido y que además ha superado a equipos como Real Zaragoza, Huesca o Cádiz -su última víctima-. Así el entrenador indálico aseguró que el Fuenlabrada «es un equipo que opta para meterse en los puestos de arriba, que está cuarto, que está ahora mismo en playoff y que seguramente, con las condiciones que tiene y cómo juega al fútbol, es un equipo difícil de ganar y que va a esta arriba hasta final de temporada», aventuró el torrejonero.

Este no está sorprendido por el rendimiento del equipo de Mere, que además en casa siempre marca, salvo en una ocasión. «Creo que están bien trabajados, que saben a lo que juegan». Añadió del mismo modo que tiene «un entrenador que tiene claro el potencial de sus jugadores y saca el máximo de todos durante todos los partidos. Creo que, cuando tienes ilusión y ganas de hacer algo bonito, al final los resultados se ven. Creo que es un poco lo que le está pasando al Fuenlabrada, viene de Segunda B, tiene muchas ganas de seguir creciendo, muchos de los jugadores habían jugado en Segunda B con el Fuenlabrada y es un equipo que, con un entrenador que está haciendo las cosas bien y con un grupo con mucha ambición, está ahí cuarto», explicó.

El citado partido no será una prueba diferente a la que hay cada jornada de Liga. «Cualquier equipo en Segunda División, cualquier partido es complicado. Todos son un examen, no sólo fuera de casa, sino también en casa, y creo que va a ser un partido complicado como todos los que tenemos hasta final de esta primera vuelta, como es el caso de la Ponferradina en casa que también va a ser complicado. En ese sentido, no creo que sea nada especial a otro partido», manifestó José María Gutiérrez al respecto.

Los triunfos consecutivos, que son ya tres desde que el torrejonero llegara al banquillo de la UDA, alimentan el estado de ánimo de la plantilla de cara a la cita, a la que José María Gutiérrez anunció que se llega «con muchas ganas de seguir ganando, de estar ahí arriba, de ser protagonistas con balón, de ser un equipo que defensivamente sea difícil de hacerle gol. Creo que de seguir en una línea ascendente. Creo que es un partido complicado, pero nuestra ilusión está intacta para poder ganar el partido».

Todo con una plantilla amplia con la dijo estar contento por el rendimiento que viene dando y que supone el bendito problema de tener dónde elegir, lo que, por otra parte, no le 'permite' hablar de refuerzos. «Estaba muy contento con los jugadores que tenía, que para mí son con los que cuento y los que están en mi cabeza para seguir este proyecto. Ya les conocía, sabía que había un equipo de gran nivel, me lo están demostrando día a día, que todos pueden jugar».

En ese sentido, el responsable de la plantilla dejó claro que para él, «cuando llega el partido, es una complicación porque sólo pueden jugar once y hay 17, 18 o 19 que pueden jugar de titulares y no lo pueden hacer. En ese sentido, es mi preocupación. A partir de ahí, lo único que quiero es que los jugadores sigan trabajando igual y que, como les dije el primer día, si trabajan de una forma positiva, de una forma buena, todos van a tener sus oportunidades para jugar».

José María Gutiérrez no va más allá del partido de mañana. El técnico de la UD Almería sí es cierto que demostró su ambición de cara al resto de partidos hasta final de la primera vuelta. No se fija otra meta que no sea sumar ««41 puntos, que es el que podemos conseguir. Ese es el objetivo».

Hacerlo no cambiará la dirección de la mirada. Ahora no se fija ni en el Cádiz, que está a cinco puntos, ni al Huesca, que está con una desventaja de tres puntos. «Yo miro a que el equipo gane. Nosotros si ganamos la verdad que nos debe preocupar muy poco lo que pueda pasar por abajo o por arriba. Lo primordial es eso. Hay que estar tranquilos. Quedan muchas jornadas y se irá viendo en el transcurso del paso de las jornadas cómo está el equipo y qué equipos están arriba».

Si es cierto que, después de los partidos disputados por su equipo lo de la confianza concuerda con el nivel que ha dado, aunque aseguró que conserva la esperanza de ver que se mejora. «Ofensivamente hemos estado bien, defensivamente no hemos hecho las cosas tan bien, por eso hemos recibido goles en casi todos los partidos y es lo que hay que mejorar, potenciar lo que estamos haciendo bien en la fase ofensiva y mejorar mucho la fase defensiva. Eso no quiere decir que sean los cuatro defensas o los cuatro defensas y el portero. En un equipo atacan todos y defienden todos. Todos tienen que poner de su parte para que eso no suceda y no recibamos tantos goles».

Los resultados son el mejor 'alimento' de la afición, sobre todo cuando el objetivo se consigue con triunfos. Inconformista con eso, sí que está conforme con el trato que recibe en la ciudad después de el tiempo que lleva en ella. El trato, señaló, es «espectacular. La verdad que estamos muy contentos del trato de la gente, del trabajo que se está haciendo dentro del club, del clima, de la ciudad, de todo. Para nosotros es un momento bonito, cuando hablo de nosotros hablo de mi familia, el poder estar aquí, y vivimos en un sitio donde estamos supercómodos y nos tratan muy bien».