Final | Ibiza - UD Almería

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Sin embargo, la más 'atractiva', por lo que a los 'actores' se refiere, de una parte se habla de la pareja que forman Juan Carlos Carcedo y Fernando Soriano en el cuadro pitiuso, de la importancia de su labor para el histórico ascenso indálico de la campaña 2006/07 que sacó al fútbol almeriense del vacío de casi treinta años, y de otra las 'intenciones' de los de Rubi de escribir un nuevo fascículo del tomo de aquí a final de la presente temporada.

El fútbol, de todas formas, viene marcado solo y exclusivamente por el presente. Ni las glorias de entonces, ni tan siquiera las rachas de ahora garantizan nada. Cada partido es una historia diferente, del mismo modo que en cada encuentro hay 'mil partidos'. Como recordatorio, valga decir que la UD Almería llega a la 'Isla Bonita' con cinco victorias consecutivas, de las que dos fueron en campos complicados como Anduva, a pesar del tiempo 'invertido' para conquistarlo, o El Molinón-Enrique Castro 'Quini', donde hicieron falta 'algunos segundos más' para hacer tal conquista. A eso se unen victorias con buen fútbol ante Real Sociedad B o Burgos –sobre todo la primera parte– y el triunfo con la mal llamada 'suerte de los campeones', ocultando que hay un trabajo que afecta al rendimiento del rival. El conjunto pitiuso también ha hecho cosas notables desde su última derrota, con dos victorias fuera –en Alcorcón y Reale Arena– y cinco puntos sobre nueve en Can Misses.

A la UD Almería no le espera un partido sencillo esta tarde en Ibiza. Más bien un duro compromiso ante un rival que se ha mostrado capaz de comprometer a sus rivales, al que los números no le dan la razón en casa, pues lleva más conquistas a domicilio que como local, que vigila bien su meta y consiguió no encajar en dos partidos, que son los mismos que como anfitrión se quedó sin marcar. Cuando lo hace no es como la UDA. Los indálicos suelen adelantarse en el primer cuarto de hora en el 20'7 % de las veces, curiosamente el mismo porcentaje de goles marcados en el último cuarto de hora. El Ibiza tiene el gol con más asiduidad en los últimos quince minutos, en los que marcó el 33'3 % de los tantos en este tramo.

Mantener la solidez es el reto indálico. Son tres los partidos sin encajar –curiosamente los mismos con los que los pitiusos llegan a la cita en el global de la competición– y todo apunta a que la intención de los indálicos seguirá siendo idéntica, si bien es cierto que Rubi tiene claro que lo que persigue es ganar, más allá de que el triunfo llegue encajando y prefiere hacerlo por 2-1 que por 1-0. El equipo ha mostrado una gran regularidad desde que comenzara el campeonato, incluso en las tres derrotas sufridas –salvo el duelo en El Toralín, en el que también se perdió por la mínima– y tiene ese comportamiento de saber a lo que juega y cuándo hay que 'apretar' al rival.

Está claro que, habiendo pasado una semana entre duelo y duelo, es probable que el planteamiento pueda parecerse, en cuanto a los que lo ejecuten, al del pasado domingo frente al Burgos CF. Con paciencia, la única novedad podría ser la presencia de Dyego Sousa arriba en lugar del sancionado Sadiq Umar, que vio la quinta amarilla del primer ciclo ante el Burgos. El portugués de nacionalidad ha demostrado ser un jugador capaz de aportar su estilo al equipo y sacarle rentabilidad. No solo por su exhibición en Anduva, que fue la exhibición coral del equipo en media hora de vértigo. Algunos de los que allí estuvieron se antoja que estarán hoy en Ibiza de salida.

Lo más normal es que Fernando siga ocupando la portería, con una de las parejas de centrales más sólidas de la categoría formada por Chumi y Srdjan Babic, crecidos en su rendimiento y compaginados, casi al unísono, para ser casi infranqueables. Pero esta fórmula tiene el fortalecimiento que aportan las bandas, bien sea Juanjo Nieto o Alejandro Pozo, por la derecha, o Álex Centelles o Sergio Akieme, por la izquierda. Posiblemente sean el sevillano y el valenciano los elegidos desde inicio. Su rendimiento es interesante. Además, Pozo aporta también muchas virtudes con sus continuas subidas al ataque, aunque obliga a tener las espaldas bien guardadas.

De todas formas, la clave de esta UD Almería tiene mucho que ver con el centro del campo, con el mando que aportan César de la Hoz y Samú Costa, tal para cual, dos jugadores esenciales. La 'duda' está en quién será el que ocupe ese espacio en el enganche. Arnau Puigmal acabó el partido del pasado domingo con un gol y buen rendimiento, como casi siempre que ha participado; Curro es el elegido últimamente, ante la baja de Lucas Robertone, que se alarga al menos una semana más. Además, Rubi ya explicó que también dependerá de lo que haya enfrente. Con la recuperación de Largie Ramazani, lo más normal es que el belga espere su momento en el banquillo y que sean de inicio los que 'han resuelto' los partidos con ese 'entendimiento' en el que aparecen Francisco Portillo y José Carlos Lazo, con Dyego Sousa como hombre en punta.

Enfrente un equipo pitiuso que está haciendo muy bien las cosas y que, como el viernes dijo Rubi en rueda de prensa, ha sabido gestionar con paciencia las malas rachas, que solo ha sido una y que duró tres jornadas. Un equipo que comenzó jugando bonito, pero por la ausencia de triunfos cambió a un estilo que da victorias, el de blindar tu portería y aprovechar un despiste o una jugada a balón parado, en la que tienen como técnico a un destacado conocedor de este 'fundamento'. El cambio hacia tener más músculo en el centro del campo, que cuando no tiene el balón se agrupa en su propio campo y cierra espacios por dentro y por fuera.

A la cita llega con dos bajas, una la del polaco Bogusz que está con la selección sub-21 de su país, y la de Miguel Ángel Guerrero, expulsado el pasado fin de semana en el Reale Arena. Por contra, recupera al argentino Gonzalo Escobar, ausente en las últimas semanas por temas burocráticos, y a Appin, que se perdió el partido ante el Sanse por presentar un cuadro febril. El partido promete, no cabe duda, para la UDA por seguir haciendo méritos para ascender, pero también para el cuadro pitiuso que tiene el playoff a 'tiro de piedra'.