El Eibar viene a por la tercera victoria consecutiva ante el Almería

La filosofía del club eibarrés y también la de su equipo cuando juega es de sobra conocida. Una fórmula muy característica que a nadie escapa, pero que exige trabajo serio para contrarrestarla porque precisamente el trabajo serio es lo que hace de los vascos un conjunto difícil de superar, por su infatigable actitud, juego solidario y muy intenso.

En esta campaña, además, han conformado una buena plantilla en la que caben muchos perfiles de futbolistas que permiten aplicar variantes para según qué escenario. De hecho, hasta la fecha, sólo cuatro futbolistas, Arbilla, José Corpas, Matheus y Jon Bautista han disputado todos los encuentros. Así, Etxeberria no ha repetido alineación en ninguna jornada, lo que, lejos de ser un síntoma de inestabilidad, es más bien un claro ejemplo del fondo de armario con el que cuenta el equipo eibarrés. Ya lo dijo el propio técnico hace sólo unos días, «Tenemos una plantilla amplia y compensada en perfiles de jugadores y también una muy buena mezcla de gente con experiencia que conoce el oficio y los chavales que están con ganas de demostrar».

Sistema de juego

No sólo cuenta con muchas variables dentro de su plantilla sino que el propio técnico también utiliza variantes en el esquema táctico. Suele usar un 1-4-2-3-1 que combina con el clásico 1-4-4-2. Siempre con un centro del campo poblado y desde el que parte tanto la transición ofensiva como defensiva. Trabajo a destajo no falta en esa parcela del campo.

El Eibar presiona fuerte ya desde que el rival coge la pelota en su propio campo. Y cuando son ellos los que tienen el balón, lejos de aquella imagen que transmitían hace años de juego directo con balones largos colgados al área, con Joseba Etxeberria salen jugando desde atrás, con un fútbol fluido que bascula de banda a banda aprovechando la velocidad de los extremos y de los laterales para abrir vías de agua por esas zonas en las defensas adversarias.

Precisamente los hombres de banda, donde los laterales de largo recorrido tienen mucho protagonismo, trabajan los centros al área buscando el remate de sus delanteros o la llegada en segunda oleada de los hombres de segunda línea. Y es que el juego aéreo- ahí poco han cambiado- sigue siendo uno de los puntos fuertes y una de las apuestas seguras en cada partido. También la estrategia a balón parado.

En el juego defensivo aún están ofreciendo desajustes aunque el momento temprano de la competición hace que esta cuestión no preocupe ya que, más pronto que tarde, y con el trabajo asegurado en cada entrenamiento, la defensa del Eibar hará gala de su fama bien ganada de rocosa y difícil de superar.

La SD Eibar, con un inicio espectacular, examina y se examina ante una UD Almería, con un comienzo descorazonador. Mucho en juego ya, cuando sólo estamos en la sexta jornada.