Édgar charla del pasado y del futuro en la UD Almería

La contestación extensa le salió de dentro para pedir perdón a la afición «si le molestó que no diéramos la vuelta. Yo pienso que lo que quiere la afición es que, cuando salgamos al campo y vistamos la camiseta, compitamos y lo demos todo. Después, los gestos pueden haber sido mejores o peores. Si fue algo que molestó que no nos quedáramos más, sí que lo podríamos haber hecho. No fue algo que hiciéramos por no querer hacerlo. Fue una reacción. Nunca he estado en esta situación y espero no volver a estar y fue la reacción natural que nos salió». El jugador rojiblanco aseveró que «lo importante es que cuando el equipo esté compitiendo en los partidos, dé la cara y defienda la camiseta y a la afición y eso es lo que para mí es lo más importante; después los gestos valen más o menos, depende de la importancia que se le dé».

Partido especial

El rojiblanco sí que es cierto que el domingo próximo tendrá «un partido especial», más allá de que no habrá nada en juego para los indálicos. «Me gustaría llegar con otra situación, llegar con el equipo en otra clasificación, pero es un partido muy especial». Su aseveración es obvia. «Es un club que a mí me lo dio todo y que es muy importante para mí y va a ser un partido bonito». Será «la primera vez que vuelvo al Villamarín y ya fue especial el partido aquí en casa contra el Betis, pues allí va a serlo también».

Y es que Édgar considera que en el Villamarín se ve «el mejor ambiente que hay en Primera División y, por los partidos que he jugado en Europa, el mejor estadio donde he jugado». Consideraba que «es una afición que, sea el rival contra el que sea, siempre anima muchísimo, siempre alienta al equipo. Cuando hay un tramo difícil te dan ese apoyo que hace tirar al equipo para delante y son partidos que el rival tiene que estar sereno, tiene que estar entero, no dejarse llevar por la excitación, por el ambiente». Sin embargo, también apostaba por la experiencia pues «todos hemos jugado muchos partidos en ambientes así y no va a ser un problema, sino que es algo también es para disfrutar jugar en estos campos e intentar sacar la mejor versión de cada uno».

A la hora de hablar del partido, el polivalente jugador de la UD Almería pidió no centrarse sólo en Isco. «Es muy buen jugador, pero no te puedes centrar sólo en Isco. Porque está Nabil Fekir, hay mucha gente. En mediocampo tienen jugadores de mucha calidad. Desde atrás sacan muy bien el balón, los laterales llegan al ataque, son equipos que evidentemente están muy compensados, tienen una forma de jugar además que ya viene de un mismo estilo de hace años y que todo el mundo entiende muy bien». Para él está claro que «el jugador más diferencial está siendo Isco, pero en cada partido vemos que lo deciden jugadores distintos y que son equipos de mucha calidad». Por eso, el propósito «es más intentar frenar en bloque al rival que no centrarnos en un jugador porque hay muchas individualidades y te puede hacer daño cualquiera».

La ida

Para Édgar el partido de ida puede que sea una referencia. «Creo que el planteamiento va a ser parecido, dos equipos que quieren tener el balón. Aquí salimos muy bien. Los primeros 15-20 minutos antes de la expulsión ya fueron muy buenos. Después el partido quedó un poco marcado por jugar contra 10, que fue un poco inexplicable que no entrara el balón y que no ganáramos». Sin embargo, queriendo tener el balón el domingo, «el Betis hay tramos en los que somete al rival, que lo tiene cerrado atrás y que es peligroso. Tiene jugadores de mucha calidad, pero también es un equipo al que se le puede hacer daño si estás ordenado y no cometes errores. Es un equipo que te penaliza mucho. Tiene mucha calidad individual y hay que hacer un partido muy completo, estar ordenados y aprovechar nuestras ocasiones».

La cita sirve también para escenificar que quedan cuatro jornadas en las que la UDA será juez de la competición pues los cuatro rivales se juegan mucho. «Por desgracia nuestro año ya está decidido, pero somos profesionales de esto y es nuestro trabajo y lo que tenemos que hacer es en cada entreno trabajar al máximo y en los partidos defender al club y a la afición al máximo y tenemos que salir a ganar. Nos tiene que dar un poco igual si el rival se juega entrar en Europa o si se juega el descenso. Son situaciones que pasan siempre a finales de año, donde equipos que no se juegan ya nada matemáticamente o clasificatoriamente juegan contra equipos que sí. Lo más sano para la competición es que el equipo salga como si se jugara algo para trabajar el partido y afrontarlo como cualquier otro».

Los retos

Con todo hecho, al Almería no se le acaban los retos. Édgar tildó la situación de «horrible, nadie la quiere. El estar descendidos, evidentemente, nunca es una situación buena y más cuando quedan aún cuatro partidos. Quedaban cinco cuando descendimos y es duro, es un sufrimiento». De todas formas, «somos profesionales, trabajamos de esto y el objetivo individualmente yo creo que para todos será dar nuestro máximo nivel y después, colectivamente, defender al club, a la afición y mientras dura el partido dar nuestro máximo nivel».

Sacó pecho con razón pues «en todo el año no hemos sacado los resultados que queríamos, pero los partidos creo que los hemos competido todos. Hemos estado en muchas ocasiones cerca de ganarlos. Luego no se ha dado en muchas situaciones, pero creo que nunca el equipo, excepto en contadas situaciones, ha perdido la cara a los partidos, ni ha sido superado claramente por los rivales». Señalaba que «en muchos tramos hemos competido de tú a tú contra todos, incluso contra los equipos de arriba».

Hablar de objetivos a corto plazo es que «cuando el Almería salga al campo compita los partidos y evidentemente ganarlos. Queremos seguir ganando. Queremos dar una victoria a la afición en casa, que no ha habido ninguna victoria en todo el año en casa y es algo que personalmente y colectivamente al grupo le duele muchísimo y somos profesionales de esto, defendemos un escudo y defendemos a unos trabajadores que están con nosotros cada día, una ciudad que no le podemos pedir más, una afición que viene al campo con nosotros, aún estando los últimos y sin ganar en casa». También hay otro objetivo que es «en el campo trabajar por ellos, luchar por ellos y acabar de la forma más digna posible y ya también empezar a sentar un poco las bases de cómo tiene que competir este equipo y este club el año que viene».

Marcos Peña

Édgar tuvo palabras de elogio para Marcos Peña, que ha llegado con los pies firmes al primer equipo. «Es un jugador de un gran nivel. Lo vi desde el principio de temporada, en pretemporada, es un jugador que suma mucho en los entrenos, que siempre trabaja al máximo». El rojiblanco destacaba de él «que tiene sobre todo muchas ganas de mejorar, muchas ganas de aprender y pregunta cosas, pide consejos y se fija mucho en lo que le dice el entrenador, en intentar mejorar, en aprovechar las oportunidades que ha tenido también».Destaca del joven del filial que «no es fácil, cuando vienes de una categoría inferior y sobre todo en la situación en la que estamos. No es fácil para un jugador joven debutar y hacerlo al nivel que lo ha hecho. También es un chico espectacular y es una persona muy humilde y también me alegro por él porque es gente que es luchadora, trabajadora, que es del club, de la casa, que viene de abajo y que se merece estas oportunidades y poder disfrutarlas también».