Bruno Iribarne saca a relucir un apellido ilustre para el deporte de Almería
El cancerbero del equipo juvenil, que jugará la final four de la Copa del Rey y debutó el martes con España, tiene las referencias deportivas de su abuelo futbolista y de su tío y su padre, referentes del balonmano almeriense
Los jóvenes de hoy en día, en Almería, saben del apellido Iribarne por las gestas que está consiguiendo Bruno, cancerbero de la UD Almería juvenil ... que ha estado toda la temporada liderando la División de Honor Juvenil y que jugará la 'final four' de la Copa del Rey de la categoría ante equipos tan históricos como Athletic Club, Real Madrid y Deportivo de la Coruña. Este puso el martes otra 'muesca' en la historia del apellido, un hito que añadir a esa aportación al equipo juvenil que tiene el sello de Lasarte -el técnico que ha conseguido cambiar la historia del equipo de la categoría con un grandísimo trabajo-. Sin embargo, lo de Bruno es un halago más a una saga de deportista con mucho honor.
Su abuelo, Pedro Iribarne del Águila (1936-2014), le conocían como 'El Chaleco' fue, según lo indicaba un 'estudioso' del fútbol como Manolo Ibáñez Nieto, «un futbolista carismático que se hizo popular por 'El Chaleco', apodo que le viene de su etapa juvenil cuando un día se presentó en los entrenamientos del equipo vestido elegantemente con un llamativo chaleco. Entre las bromas de compañeros, directivos y aficionados le llevaron a ser 'bautizado' por 'El Chaleco', 'mote' que el bravo futbolista aceptó con su característico humor y simpatía».
Iribarne podía jugar como lateral y como central, aunque especialmente de lateral derecho y de central. Manolo Ibáñez destacaba de él que fue «un defensor intenso, rápido y valiente que dio muchas tardes de gloria al fútbol almeriense». Dos de sus hijos –Pedro y Jorge– decidieron que aquella intensidad era más aprovechable en una pista y decidieron formar parte del mítico Europa Óptica Almería, el primero, formando parte de un mítico equipo dirigido por Miguel Moreno en el que estuvieron los Ramón Ruiz Medina, que luego sería entrenador; Javi Frutos, Antonio Hernández Granados, Serafín Quero, Emilio de Amo –nunca quería ponerse camiseta amarilla–, Miguel García, Pepe Salguero o Lakic. Pivote de la época llegó a enfrentarse a Rafa Guijosa, que luego fue considerado mejor jugador del mundo, pero que hizo sus pinitos con un mítico Caserío Vigón, rival del por aquella época Cajalmería.
Y su hermano Jorge -padre del ahora fubolista internacional-, lo tuvo más difícil, pero sus ganas de competir –estuvo en la preselección española en un programa de talentos llamado 'Objetivo 92'–, le obligó a dejar el Cajalmería para enrolarse en un equipo hecho en la Brigada, que adoptó aquel nombre. Tras tres años con el equipo 'militar', regresó al conjunto ahorrador, al que la fusión de cajas devoró, pese a los intentos, de los directivos de Almería de seguir aquella relación que tenía la ciudad con el balonmano, defenestrado para que el 'oficial' de la entidad se ubicara en Ronda, como para Málaga capital se destinó la financiación para el equipo de baloncesto y en Almería para el voleibol. Surgieron los Moreno Huertas, Ciudad de Almería, Almería 2005…, en los que Jorge Iribarne Cantón hizo sus 'pinitos', ya con otros jugadores como Javi Rojas, el propio Salguero, Valenzuela, Nano Almenara, Karasev...
Ahora, el hizo de Jorge pone de nuevo en el candelero al apellido Iribarne y lo hace con brillo. Bruno está haciendo un 'temporadón' y está en el punto de mira de 'mil equipos' –ahora está en la UDAlmería, pero estuvo en la cantera del Real Madrid–. El pasado martes debutó con la selección española de categoría sub-19 en un encuentro amistoso ante Noruega, el cual ganó el combinado español por un 3-0. Que España no encajase ningún gol en gran parte se debió a la actuación del joven valor de la cantera de la UD Almería, Bruno Iribarne, que realizó un gran encuentro con muy buenas paradas, dos de ellas decisivas para mantener la imbatibilidad durante los 90 minutos que defendió la portería del combinado nacional.
La selección española sub-19 volverá a jugar hoy ante el mismo rival a partir de las once de la mañana, también en Las Rozas. Posteriormente, el combinado nacional tendrá que afrontar el clasificatorio para el Europeo sub-19 en el mes de marzo, en el que se enfrentarán ante Dinamarca, Luxemburgo y Ucrania y a los que, si todo sigue como hasta ahora, el almeriense será de la partida y ojalá que con un título bajo el brazo. Sin duda, a falta de confirmar la sede, la Copa del Rey de la categoría, por sistema de concentración, se decidirá con dos eliminatorias a enfrentamiento único en campo neutral. Los partidos serán como los de las anteriores eliminatorias, con prórroga y tanda de penaltis en caso de empate. El sorteo será puro, se jugará una semifinal el miércoles 8 de marzo y la final se disputará el domingo 12 de marzo. Todo en una misma semana en la que los jugadores estarán concentrados en la sede de la final.
La UDAlmería, con importantes actuaciones de Bruno Iribarne, llega tras superar, primero, al Elche (2-1), Deportivo Alavés (2-1) y UDLas Palmas (0-1).
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión