El banquillo del Almería, uno de los cuatro libres de Primera

Mohamed El Assy se dio, el pasado lunes, diez días de plazo para cerrar la contratación de un entrenador que capitanee un proyecto más sólido, con cuerpo, y que no divague en la competición, aunque para ello no es sólo cuestión de técnico, sino incluso más aún de plantilla, tal y como sucedió en el recién concluido campeonato, donde Rubi tuvo que trabajar con unos mimbres que no permitían otra cosa que pelear por la seguir vivo hasta el final de la temporada y, llegados a ese punto, tratar de dar el golpe definitivo para lograr la permanencia.

Sí es cierto que la contratación de un técnico de prestigio será la puerta abierta hacia la capacidad para convencer a quienes titubean a la hora de tomar la decisión definitiva. De todas formas, no es fácil, aunque se van cerrando puertas para quienes están en el mercado. Ayer, por ejemplo, se cerró la del Valencia CF que continuará teniendo al Pipo Baraja como responsable, tras afrontar el reto de salvarlo, en las últimas jornadas del campeonato, y tener ahora la posibilidad de coger el proyecto che desde el primer día.

La disputa, este fin de semana, de la Liga de las Naciones, aunque parezca una barbaridad, podría hacer que la 'maquinaria' se ponga en marcha porque hay técnicos con opciones de ser seleccionador, cuya vacante en la lista de distintos clubes abriría y cerraría puertas a futuribles. En Almería han sonado muchos nombres como los de Marcelino García Toral o Andoni Iraola. Los dos tienen metas altas pues suenan para clubes con cierta solera a nivel continental y en algunos casos tenido un destino idéntico en ambos casos, incluso la selección o el Olympique de Marsella.

También ha sonado con cierta insistencia del nombre de Francisco. El almeriense, que ha dejado la imagen de un técnico con solvencia y certificado de calidad en los equipos en los que ha estado, tiene cerca dirigir al Rayo Vallecano. Sin embargo, el equipo madrileño no parece haber deshojado la margarita de momento y esta situación se debe, sin duda, a la espera. Se desconoce si por parte del cuadro franjirrojo o del futurible inquilino del banquillo de Vallecas. El caso es que el almeriense no está descartado para llevar las riendas del club de su ciudad, años después de que fuese destituido tras una derrota en Ipurua y tras haber cumplido, en la primera temporada en un equipo de máxima categoría, con la salvación. Mohamed El Assy no los descartó, ni a él ni a Andoni Iraola, que ha hecho un grandísimo trabajo en el Rayo desde que se hiciera cargo del equipo madrileño. El director general de la UD Almería se limitó a decir que «alguno de los nombrados no está» entre los elegidos. También se nombró a Pacheta.

El caso es que el reloj avanza y la obligación aumenta. Los diez días se cumplen pronto y, si bien hay tiempo porque aún se desconoce cómo quedará la categoría –falta el elegido entre Deportivo Alavés y Levante UD–, sí es cierto que en breve se conocerá la fecha del inicio de la pretemporada y es obligado tener un 80% de la composición de la plantilla cerrada, aunque esté sometida a los cambios que origina el mundo del fútbol, con un mercado que cerrará cuando ya se hayan disputado tres jornadas del calendario, lo que provocará situaciones como la vivida el pasado curso en la que hubo jugadores que participaron con un equipo en los tres primeros partidos del calendario con un equipo y, desde la cuarta jornada, se enrolaron con otro, como sucedió con Sadiq Umar.

De todas formas, la confección de la plantilla, aunque en cierto modo sea una 'obligación' de quienes forman la parte de secretaría técnica de la entidad –principales 'culpables' de los éxitos o fracasos del rendimiento de la plantilla–, está claro que tiene que ver con el técnico que sea responsable, cada día, de sacar el mejor rendimiento a sus jugadores. Sin lugar a dudas, ese técnico tendrá que ver en la confección de la plantilla porque, como dijo el propio El Assy, «un jugador que no juega es tirar dinero a la basura», lo cual quiere decir que para la confección de la plantilla es condición sine qua non tener atado al nuevo técnico rojiblanco.