Arnau Puigmal reconoce las virtudes del Barça, pero «el Almería tiene sus armas»

Es una 'necesidad' más para ir poniendo punto final a semana larga y en la que el inicio no fue el más deseado. «La semana está siendo muy positiva, después de un mal resultado en Girona, pero muy a gusto», apuntó el rojiblanco, que no dudó en dar luz a lo que la afición quiere escuchar. «Creo que físicamente el equipo está bien, como siempre. Estamos trabajando duro en los entrenamientos. Sí que es verdad que no podemos negar que fue un palo duro el del otro día, pero tenemos que reponernos y no hay tiempo en esta Liga y mirando hacia delante pero en positivo», mostrándose confiado. «Almería nunca se rinde. Estamos en un momento complicado por las semanas que hemos tenido y último día contra el Girona, pero le vamos a dar la vuelta a la tortilla y confío mucho en el equipo».

Lo peor es el tiempo que ha debido transcurrir entre el final de aquel partido y la cita frente al Barça. «Sí que está siendo una semana larga, pero a veces nos toca una larga, otra corta y nos tenemos que adaptar. Los entrenamientos están siendo muy buenos y ya enfocados en el partido». Esa mirada fija en el equipo blaugrana tiene un aspecto destacado para Puigmal y que habla de la solidez defensiva de los de Xavi Hernández, con esas 17 porterías a cero. «Defensivamente ellos están fuertes esta temporada, pero nosotros tenemos nuestras armas aquí en casa, somos un equipo fuerte de batir y a la vista está que aquí en casa hemos sacado resultados muy positivos y sabemos nuestros puntos fuertes y vamos a intentar explotarlos al máximo».

Unai Emery quería que sus equipos supieran sacar rendimiento a las acciones a balón parado, que es un 'bálsamo' para los modestos por esa virtud que tiene por igualarse todo, dando igual ser líder que colista. «Sí. Venimos en una racha positiva de balón parado, estamos muy fuertes, pero tenemos otros puntos fuertes y tenemos que explotarlos al máximo». También el hecho de que el conjunto azulgrana tiene hoy Manchester y el próximo 2 de marzo la cita frente al Real Madrid, en la ida de la Copa. «Los equipos de arriba, que juegan Champions o Europa League, otras competiciones, sí que es verdad que tienen más partidos y en menos tiempo de recuperación y sí que es un punto que tenemos que aprovecharlo».

El rojiblanco no sabía con certeza si esa 'dificultad' puede ser para aprovecharla. «No lo sé. Yo creo que el Barça es el Barça y siempre sale a ganar». Algo que, con lo que tiene el Almería, es también obligación, como el hecho de querer ganar a un equipo de la solera del blaugrana. «Sí. En mi caso, yo soy de Barcelona y es el equipo cuando eres pequeño en el que te fijas. Es uno de los más grandes, pero la motivación es la misma que si fuera otro equipo, entre comillas, menor, pero sí es verdad que estamos con muchas de que llegue el domingo».

Precisamente, por su pasado perico, la motivación es extra. «Yo de pequeño era del Barça y cuando me fui al Espanyol cambió un poco porque en el Espanyol está la rivalidad de la ciudad y sí que le tengo ganas».

También los aficionados que son 'puros' de la UDA, a los que les pedía que, teniendo en cuenta que se llega «de un palo duro allí en Girona», «ahora los necesitamos, aunque siempre han estado ahí, pero en especial este domingo porque es un partido muy importante y además con un equipo como es el Barça». Este será el primero de tres rivales a los que mirar por su grandeza. «Sí que son equipos importantes, pero los afrontamos y los vemos de la misma forma. Tenemos muchas armas aquí en casa, mucho buen juego por dentro y por fuera, por las bandas, y tenemos que explotarlo. Aquí en casa somos muy fuertes».

Ese calendario se asemeja al de inicio de enero con Real Sociedad, Atlético de Madrid y Valencia. «Hemos sacado puntos muy importantes contra equipos fuertes de la Liga, pero lo afrontamos de la misma manera y tenemos muchísimas ganas». Además, recetó lo de ir «partido a partido y sí que te vas fijando en los rivales que vienen porque en un par de semanas te enfrentas a ellos».

En el plano personal, el barcelonés se mostraba contento. «Llevaba tiempo sin tantos minutos y el otro día en Girona me noté bien. Falta el punto físico de competición, de jugar, pero estoy muy contento» y le vale esa polivalencia de la que hace gala. «Siempre he sido un jugador todo terreno, pero yo me encuentro más cómodo en la posición de 8 o de 10, pero donde haga falta para ayudar al equipo», también podría hacerlo a balón parado. «Sí que es verdad que metí algún gol, pero aquí hay buenos lanzadores y hay que respetar los roles del equipo».

De todas formas, siempre ha aportado al equipo. El año pasado, por ejemplo, hizo un gol para la historia, pues supuso dejar en la mano una permanencia que parecía perdida ante el Alcorcón. «Hace tiempo, pero lo recuerdo con mucho cariño. En el momento del gol no le das la importancia que realmente tuvo al final, pero cuando me paré a pensar en casa, en Barcelona, sí que dije que sí que tuvo importancia aquel gol y siento mucho orgullo de poder haberlo marcado».