El Almería está preparado para el fútbol que viene, conocedor del que se fue

La UD Almería, en su rendimiento a lo largo del campeonato lejos del Estadio de los Juegos Mediterráneos, puede encontrarse cómodo en ese panorama. El equipo rojiblanco, pese a que sólo ha sumado uno de los últimos nueve puntos en la competición, también es cierto que antes de esas tres citas sumó diez de los 12 puntos anteriores. Se maneja bien fuera de casa, donde ha conseguido puntuar en 13 de los 16 partidos jugados a domicilio, con casi un triunfo cada tres compromisos –ha ganado cinco, lo que supone un 31,7 % de los duelos disputados–, yéndose al 50 % en los empates –en sus 16 desplazamientos conquistó ocho igualadas– y pierde menos de un partido por cada cinco jugados –ha cosechado tres derrotas en esos 16 encuentros, un 18,75 %–.

De todas formas, el análisis de lo transcurrido en lo que va de temporada, en números generales, depara casi un 40 % de victorias locales por algo menos del 25 % de triunfos cosechados a domicilio. Después de 31 jornadas disputadas, se han celebrado 340 partidos de la Liga SmartBank –deberían ser 341 pero falta por terminarse el Rayo-Albacete, previsto para pasado mañana–, que deparan 134 victorias de los equipos que jugaban como locales –el 39,4 %–, 122 terminaron en tablas –un 35,88 %– y los 84 restantes –un 24,7 %– son victorias conseguidas a domicilio, lo que arroja una victoria a domicilio por casi cada cuatro partidos celebrados.

Así, a lo largo de las 31 jornadas que se llevan disputadas en el campeonato liguero de Segunda División, en 18 de ellas hubo mayoría de triunfos de los equipos que jugaban como locales –la jornada vigésima está todavía en el 'alero' porque falta por computar lo que suceda entre Rayo y Albacete, que va 0-1 para los manchegos y la cifra podría quedar en 17– y solamente en una jornada no se dio ni un triunfo visitante. Este hecho ocurrió en la antepenúltima de las jornadas disputadas hasta ahora, la vigésimo novena, en la que se cosecharon nueve triunfos locales y dos empates. Esa es la más 'nefasta' para los intereses de los equipos que emprendieron viajes para jugar a domicilio.

La tercera jornada tiene números parecidos, pero el triunfo del Alcorcón en Lugo (2-4) impide tanta frustración entre los que jugaron como 'forasteros'. Aquella jornada, en la que el Almería derrotó al Huesca en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, también se lograron otros ocho triunfos locales más, con esa victoria visitante y un empate, el cosechado entre Las Palmas y el Racing (2-2).

Otra jornada nefasta para los visitantes fue la trigésima, con sólo una victoria. De todas formas, se dieron hasta seis empates a domicilio, por los cuatro triunfos conseguidos por los equipos que jugaban en casa, uno de ellos el que logró el Cádiz, remontando, para imponerse a la UD Almería, en Carranza.

Porque un solo triunfo también se dio en otras jornadas como la 6ª, con cinco victorias locales y cinco empates;la 14ª, con siete victorias locales y tres igualadas –es la tercera con mayor número de victorias en casa–, la 23ª, también con siete triunfos en casa; la 16ª, con cuatro victorias locales y seis empates, que son números calcados en la 24ª y en la 30ª, y en la 26ª, en la que los locales se impusieron en seis citas, mientras el empate se dio sólo en una.

Con la referencia de que han sido menos las victorias, está claro que jornadas en las que se dieran más triunfos visitantes que locales hay menos, se podría decir que la mitad porque son sólo ocho, aunque no con una diferencia grande, porque a lo máximo que se ha llegado fuera ha sido a lograr cinco victorias en una misma jornada liguera. Y sólo la vigésimo octava supone una gran diferencia entre triunfos a domicilio y los locales. Sólo se dio un triunfo en casa y no debió ser así. Se produjo en El Alcoraz, con el Almería como el otro protagonista y ya se recordará el gol de Mikel Rico ayudándose de la mano y el penalti clamoroso cometido sobre David Costas cuando el partido expiraba y el marcador señalaba un 3-2 para los aragoneses.

Esa jornada se dieron cinco victorias a domicilio –el tope máximo conseguido por los visitantes, como en las jornadas 10ª, 11ª, 12ª, 21ª y 31ª– y cinco empates.