Final | La UD Almería suma tres puntos de oro

Han pasado muchos años desde 1986, pero la frase nunca pierde vigencia. Más ahora y en esta Liga marcada por un parón que se producirá cuando acabe el partido de hoy para volver cuando el año esté dando sus últimos estertores. Y más que remontar un resultado, se trata de conseguirlo, de lograr una victoria frente al Getafe porque los alrededor de 50 días que quedarán para volver a jugar van a ser de 'aúpa'. Serán días para pasar por 'consultas externas', para tratar la locura, porque solo se habrán sumado 16 puntos y quedarán unos veintitantos para lograr la salvación y hay que andar con cautela, o para que el psicólogo evite que se pueda caer en depresión por tanto tiempo sin fútbol y queriendo salir de 'arenas movedizas', conscientes de que lo que un futbolista quiere es jugar al día siguiente de perder un partido.

Las cosas del fútbol han hecho que al Getafe, formado por una buena plantilla y que inició el campeonato con las miras puestas en, cuando menos, no sufrir, se le han torcido las cosas. Decía Mourinho tras jugar en el Benito Villamarín que la Europa League iba a estar llena de 'tiburones'. La parte baja de la clasificación, en la que hay diez equipos metidos en solo seis puntos, también hay 'tiburones' como Valencia, Espanyol, Sevilla y el propio Getafe que visita hoy el Power Horse Stadium, o el Villarreal con siete puntos de ventaja sobre el penúltimo clasificado.

Consciente de eso, la UD Almería sabe lo que se juega hoy frente al equipo azulón. Estos partidos conllevan jugarse seis y hasta siete puntos, pero para eso habrá que esperar al partido de vuelta. Lo que hay en juego son tres puntos para seguir creciendo, para alargar la estadía entre los mejores locales de la competición, pero sobre todo para ver un horizonte todavía lejano, pero cada vez más cerca si se cumple lo de ser fuerte en casa. Las permanencias se logran en casa y los éxitos mayores añadiendo los resultados fuera, pero a este equipo no le persigue otro sueño que el de estar la temporada próxima en Primera División, ni más ni menos.

Puede y debe ayudar que el sábado ante el Barça se hiciera un buen partido, incompleto eso sí porque se 'cayó' en la segunda parte, pero quién, con los pies en suelo, pensaba en sacar algo en el Camp Nou. Nadie. Lo que sí es una máxima en deporte, no solo en el fútbol, es que jugar un partido ante un rival de la magnitud del Barça ayuda a mejorar en la siguiente afrenta, aunque ello no quiere decir que el Getafe vaya a ser un equipo fácil en entrar en la autocomplacencia no ayudará para afrontar el partido. El del sábado ayuda a 'adivinar' que hay jugadores que tendrán sitio en el encuentro de esta tarde. La presencia de Fernando Martínez bajo palos no genera dudas. Los porteros no se casan y el trabajo 'construye'. Su actuación en el Camp Nou pone aplomo para la continuar bajo palos.

Las dudas se generan en tres de los cuatro jugadores que estén en defensa. El hecho de que, por ejemplo, Alejandro Pozo no estuviera en el once le da un plus para entrar de inicio, situación que ocurre por ejemplo con Srdjan Babic, que jugó la segunda parte y podría formar en el centro de la zaga con Rodrigo Ely, su compañero esta temporada, pero también Chumi, que lo fue casi siempre el pasado curso, ha dado muestras de estar ya repuesto de los problemas sufridos en el inicio de campeonato, con ritmo y capacidad para interpretar bien el juego. La banda izquierda tiene en Akieme a un ocupante seguro.

Gestionó minutos Rubi en el Camp Nou con los tres que se presume estarán de inicio frente al Getafe. De un lado, César de la Hoz descansó y su ausencia puede que se notara –seguro– en el centro del campo indálico y sería un atrevimiento no tenerlo ante el Getafe. Lucas Robertone, brillante esta temporada, jugó 68 minutos y es clave en la presión y en su aportación en el centro del campo, mientras Gonzalo Melero forma sociedad en la creación con El Bilal Touré, otro sacrificado ante el Barça, para la finalización. Con Embarba recuperado de las dolencias que le obligaron a ser sustituido frente al Celta y en el banquillo el sábado, y Leo Baptistao jugando solo 45 minutos, tienen ventaja para estar en el once por delante de Largie Ramazani, que jugó los 90 minutos, y Lázaro Vinicius, pese a que este vio gol en el último partido disputado en el Power Horse Stadium.

El Getafe llega a Almería afectado por los problemas, sobre todo en defensa, donde Quique Sánchez Flores deberá introducir cambios porque jugadores como Domingos Duarte o Gastón no podrán estar por sanción, tampoco Portu, que se estrenó como carrilero diestro en defensa de cinco, además de que existen dudas al respecto de Djené, que acabó el partido tocado, siendo sustituido con molestias en el 75. Sin Angileri y sin Arambarri, lesionados de larga duración, sí es cierto que Amavi vuelve tras sanción y Alderete jugó la segunda parte y hoy puede empezar de inicio.

El técnico azulón podría romper esa línea de cinco con la afrontó el partido frente al Cádiz para dar entrada a un Damián Suárez que no jugó, pero volvió tras molestias al banquillo, con Alderete como acompañante de Mitrovic en el centro de la zaga. Lo cierto es que tanto el lateral uruguayo como el central togonés deberán 'pasar el filtro' antes de emprender viaje a Almería.

Con cinco partidos sin perder, lo cierto es que solo ha ganado uno de los últimos siete encuentros disputados, con mejor rendimiento fuera que en casa. De hecho, cierra bien su portería a domicilio, del mismo modo que abre las contrarias. Solo en un partido, el disputado frente al Rayo, no vio portería contraria cuando jugó a domicilio con el peligro de jugadores como Munir, pero sobre todo de Enes Ünal. Con un punto más que la UDA en la clasificación, ganarle sería pasarle y pasar los casi dos meses saboreando puntos. Si no, esos más de 50 días serán 'molto longos'.