El Almería enseña su secreto: el trabajo

Ni Barça, ni Real Madrid, ni Atlético de Madrid, ni ninguno de los 16 restantes compañeros de viaje que tiene el cuadro rojiblanco en Primera División ha conseguido igualar esa vía que permite al equipo estar cerca del gol y, por más que se sepa, la versatilidad en la ejecución de las acciones a balón parado permite ser uno de los equipos más peligrosos del campeonato liguero.

El Valencia fue víctima de la estrategia de la UD Almería, que encajó el segundo gol en el Power Horse Stadium como consecuencia de un saque de esquina. Una imagen que se ha producido, con la del domingo, en nueve ocasiones, una cifra que ningún equipo del campeonato ha logrado llevar a cabo en las 28 jornadas que se llevan disputadas. Una auténtica barbaridad pues supone que los rojiblancos logran el 26,47% de sus tantos a través de esa estrategia, con Lucas Robertone como un 'asistente' de lujo –el argentino ha colaborado en ocho goles como el encargado de dar el último pase, aunque LaLiga en sus estadísticas le quite uno–.

Ante el conjunto dirigido por Rubén Baraja, la pareja que puso a la UD Almería por primera vez por delante en Balaídos firmó el gol que supondría el de la postrera victoria frente al conjunto che, en el Power Horse Stadium. La diferencia está en que en Vigo el balón se fue –lo puso el argentino al primer palo– y el pasado domingo el autor del gol, que fue el mismo que en la ciudad olívica, la 'enganchó' en el segundo palo. Antes, el equipo había 'viciado' al Valencia a 'perseguir' a Rodrigo Ely, otro 'colaborador' en la fábrica del gol desde el saque de esquina de la UDAlmería, que generalmente aparecía por el primer palo y el hombre es un 'animal de costumbres'. El Valencia cayó en la reiteración y, cuando el balón voló al segundo palo, Mamardashvili 'falló' en la salida y Srdjan Babic la metió donde quiso para poner a los indálicos en el camino hacia el importantísimo triunfo frente a un rival directo como el valencianista.

El Valencia no cerró la puerta. Esta sí estuvo cerrada a cal y canto durante los últimos días de entrenamiento de la UD Almería para trabajar sin que nadie mirara, para trabajar, al fin y al cabo porque lo visto el domingo en el primer duelo ante un rival directo del mes de abril, tras no conseguir la victoria en los dos duelos del mes de marzo –en Sevilla o en casa ante el Cádiz–, fue a un equipo que compite cada vez que juega y que busca el objetivo a base de trabajo. Si no fuese así, el Almería no podría llevar esa gran cifra de conquistas en jugadas que se ensayan día a día.

Con el noveno gol, el Almería sumó su vigésimo sexto punto en casa, que le convierte en uno de los mejores equipos como local de la competición, sólo superado por FCBarcelona, que ha sumado 35 puntos en el Camp Nou;Real Madrid, con 31 en el Santiago Bernabéu; Atlético de Madrid, que acumula 27 puntos en el Civitas Metropolitano, y Villarreal y UD Almería, que han conquistado 26 puntos en La Cerámica y el Power Horse Stadium, respectivamente, si bien es cierto que el conjunto castellonense ha disputado en casa dos partidos menos que los rojiblancos.

Pero se puede ir a más y es que con 30 puntos todavía por disputarse, los indálicos ya llegan a la treintena, con lo que estarían a cuatro victorias de sumar un par de puntos más que los que podrían valer, sin ser exacta la cifra, para lograr la permanencia en la máxima categoría. Con otra lectura que permite a los rojiblancos mejorar en dos puntos esa 'media' de uno por partido disputado. El Almería, que acabó la primera parte del campeonato –hasta el parón por el Mundial– con 16 puntos en catorce jornadas, se 'alegra' por acercarse a esos mismos guarismos, pues desde la vuelta a la competición en el Nuevo Mirandilla el equipo de Rubi ha sumado catorce puntos en otras tantas jornadas.