El Almería B tiene otra batalla para ganar la guerra

La competición se asemeja a una guerra de mil batallas, y la UD Almería B tiene este mediodía, en el Anexo del UDAlmería Stadium, una de esas contiendas clave que pueden marcar el rumbo final de la temporada. Después de haber ofrecido una imagen muy seria en su visita al UCAM Murcia, donde logró un valioso empate sin encajar goles, el equipo de Alberto Lasarte se ahora a una nueva prueba de fuego. El duelo ante el Estepona está cargado de una exigencia especial, por mantener la posición entre los cinco primeros del grupo y, por tanto, dentro de la zona de acceso al playoff a Primera RFEF, un objetivo al que se aferra con fuerza.

El contexto de la clasificación añade dramatismo a la cita. La visita del Estepona no será una prueba menor, ya que el conjunto malagueño llega con urgencias propias y con la ambición intacta de meterse en la pelea. La derrota sufrida indálica en casa frente al Xerez DFC fue un duro golpe para el Almería B por la imagen. Ese tropiezo, unido a la igualdad reinante, ha generado una situación en la que una nueva derrota podría tener consecuencias críticas. El 'otro' Xerez, con los mismos puntos que los almerienses, y el propio Estepona, que suma sólo tres menos, acechan el quinto puesto. De caer, el equipo rojiblanco podría verse fuera de playoff, al menos provisionalmente, pese a tener el golaveraje ganado con el conjunto jerecista y favorable de momento ante los esteponeros, a quienes ya vencieron en la ida (0-1) con un tanto de Marsu.

Atención

Con este panorama tan comprimido, el filial debe mirar con atención a lo que ocurre por detrás y también puede permitirse soñar con mirar hacia arriba. Si ganan, los de Lasarte podrían acercarse al UCAM, tercero, y al Antoniano, cuarto, con sólo dos y un punto de ventaja respectivamente. Es cierto que el golaveraje con el conjunto universitario está perdido, pero la dinámica actual invita al optimismo si el equipo es capaz de encadenar buenos resultados.

Por todo, el choque se antoja vital para el futuro inmediato del Almería B. Más aún si se tiene en cuenta que en la próxima jornada deberá visitar al Juventud de Torremolinos, que pelea por el ascenso directo, lo que añade dificultad al calendario. Una victoria ante el Estepona permitiría a los rojiblancos encarar esa salida con mayor margen de maniobra y algo de oxígeno, en una categoría donde el más mínimo error se paga caro y donde cada punto cuenta en esta recta final marcada por la igualdad extrema entre rivales.

El equipo llega tras firmar una actuación muy sólida en La Condomina, donde dejó su portería a cero ante un candidato al ascenso. Ese orden defensivo será fundamental para afrontar el duelo ante un Estepona que, si bien no ha ganado en sus dos últimos compromisos, ha demostrado ser un rival correoso. Empató fuera frente al líder y, aunque cayó como local en la pasada jornada ante el Antoniano, no es un conjunto al que se pueda subestimar. Su historial a domicilio incluye siete porterías a cero, aunque también ha dejado de marcar en seis de sus salidas, lo que lo convierte en un equipo de extremos.

Como suele ser habitual, Lasarte podría introducir novedades. Tras la derrota ante el Xerez, advirtió que el equipo necesitaba un aviso que pareció tener efecto en el buen partido realizado ante el UCAM. La intención será consolidar esa imagen, mantener la solidez y sumar tres puntos que podrían valer su peso en oro en esta fase crítica. El rival no lo pondrá fácil y los rojiblancos lo saben para un partido dirigido por el murciano Ibáñez Juárez.

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