El Almería y su afición deben 'unirse en la salud y en la enfermedad'

El fútbol, como el amor, vive de la pasión, de la entrega sin condiciones y de la esperanza inquebrantable. El 14 de febrero, San Valentín inunda las calles con promesas de afecto y complicidad, pero el verdadero romance para muchos no se mide en flores ni en cartas, sino en el latido compartido de una afición que vibra al unísono. Y aunque el calendario marque que la cita entre Almería y Elche será esta noche, la espera solo avivará el deseo de una victoria que haga latir más fuerte los corazones indálicos, sobre todo y más que nada los corazones rojiblancos.

En los juegos del amor y del fútbol, la fidelidad se mide en noches de desvelo y en gritos ahogados antes de un desenlace incierto. La UD Almería, arropado por su gente –que no falte nadie a pesar del horario–, buscará regalar a su hinchada el triunfo que haga olvidar las penas y reavivar la ilusión. Enfrente un Elche que no quiere ser un visitante discreto, pues aspira a conquistar un resultado que lo acerque a sus propias ambiciones, convirtiendo el césped en un escenario de deseo, estrategia y entrega.

Hoy, más allá del día señalado en el calendario, será una cuestión de pasión. Porque el amor al fútbol no entiende de fechas ni de lógica; solamente de ese latido irracional que nos hace creer que, en 90 minutos, todo es posible. Perder, empatar, pero sobre todo y por encima de todo conseguir la victoria que alivie las cuatro jornadas sin ganar.

El sustituto

Con la baja del senegalés Dion Lopy por acumulación de amonestaciones, el principal objetivo es encontrar al sustituto que ocupe esa posición en el centro del campo, escenario del que ha desaparecido en los últimos partidos Gonzalo Melero, titular en alguno de los buenos encuentros realizados por la UD Almería.

El madrileño puede ser el primer candidato para ser la brújula indálica en la cita de hoy en el UD Almería Stadium. Habría que ver con qué acompañante porque la posesión de balón en este duelo será clave. Se ha visto que el Elche sufre sin balón y que persigue crecer desde la posesión, que ha sido lo que le ha permitido ser firme candidato al ascenso a Primera.

En los últimos partidos, los rojiblancos han sufrido en los momentos en los que se vio al equipo inferior en la pelea. Las primeras partes de los partidos en el Carlos Belmonte de Albacete, ante el Real Oviedo y la semana pasada en Riazor fueron, precisamente, los motivos que condujeron a que los tres rivales en cuestión se adelantaran en el marcador. Ante el cuadro carbayón el desaguisado no hizo tanto daño, pero ante Albacete y Deportivo la rémora supuso incapacidad para remontar.

A decir verdad, ante el equipo castellano-manchego faltó algo más de tiempo, pero del mismo modo los partidos duran lo que duran y no es excusa. Lo hecho el pasado domingo fue una primera parte tan deficiente que cuando el equipo quiso 'aparecer' con sus formas habituales ya era demasiado tarde.

Obligación

Con lo que hay, sabiendo que el centro del campo sufre rémoras como las de los lesionados Iddrisu Baba y Gui Guedes, así como la citada de Dion Lopy, hasta el tarraconense Selvy podría tener su protagonismo en la cita. En el resto de líneas no se aventuran cambios.

Luis Maximiano seguiría bajo palos, con Marc Pubill y Bruno Langa en los costados, mientras en el centro de la zaga lo más normal es que aparezcan Chumi y Édgar González.

Las cuatro plazas restantes tienen en Luis Suárez a un valor fijo. El cafetero sigue a 'su bola', viendo portería con gol en siete de los últimos ocho partidos con algunos días en los que no se quedó sólo en un gol. Así, en ese espacio de tiempo, el rojiblanco ha conseguido ponerle firma a once dianas.

Las otras tres plazas tienen varias alternativas. En el Martínez Valero jugaron de inicio Sergio Arribas y Álex Centelles, éste para formar un doble lateral por la izquierda con el mozambiqueño Bruno Langa, mientras Leo Baptistao hizo de segundo punta. Los tres mandan en posibilidades, aunque, en los últimos partidos, Nico Melamed y Lázaro Vinicius estaban por delante para estar en el once.

La demostración

Hoy es un día de esos en los que equipo y afición deben demostrar que están el uno para el otro. Es obligatorio hacerse fuerte, algo que pasa por estar unidos. No son autosuficientes, ambos se necesitan. Es un momento de amor que sirva para superar un trance como el padecido como consecuencia del dos de doce sumado y que ha dado pie a que las opciones se tambaleen, por ahora.

Quién más quién menos ha hecho su trabajo porque al mal momento han contribuido los buenos resultados de los rivales y el Elche es uno de ellos. El cuadro de Eder Sarabia ha sumado diez de los últimos quince puntos disputados en 2025. Sí es cierto que no es un rival que se haya consolidado donde está por sus números a domicilio, donde es cierto que sólo ha ganado tres partidos, pero suma cinco más en doce partidos en los que mantuvo su puerta a cero en cinco encuentros, pero sin marcar en seis.

Llegan sin Yago De Santiago, lesionado hasta final de curso, y sin Josan Fernández, sancionado por acumulación de amonestaciones. Sin embargo, Eder Sarabia, que también es baja por tarjetas, recupera a Agustín Álvarez, José Salinas y Bambo Diaby, ausentes ante el Tenerife.