Alerta por rachas de viento en el partido entre Girona y UD Almería

No es recomendable surfear con esas condiciones, pero los 'remojones' sufridos por la UD Almería en los dos últimos partidos, puede que no por juego pero sí por resultados, le obligan a tirarse a la 'piscina' porque si en esta DANA consigue engancharse a una racha de 'viento a favor' estará más cerca de alcanzar la 'pirueta' perfecta.

Montilivi es algo así como la tormenta soñada si se va bien pertrechado para afrontar lo que llegue. El Girona se muestra 'paciente' a la vez que letal en su casa. Desde que la Real le ganara el 2 de octubre, solo el Barça –equipo que ha sabido amoldarse a la 'tierra'– ha sido capaz de salir airoso, y con problemas, de un campo donde ha ganado a Athletic, Sevilla y Valencia, empatando con Cádiz, Osasuna y Rayo. El GPS del Allmería se pierde fuera para encontrar los caminos hacia la victoria. Pero ya toca. Es una necesidad que bordea la obligación porque, aunque no ha perdido la relación punto-jornada –son 22 conquistas en 21 partidos–, con 38 es complicado vivir placenteramente el tramo fina de la Liga con el objetivo pendiente de un hilo.

El Girona no contempla, en su particular hoja de ruta, encajar un resultado que le meta en el 'meollo' y verse superado por el equipo de un ex como Rubi. Este, el equipo indálico, no da crédito a ver pasar las jornadas y no poner una 'pica en Flandes' jugando en un campo que no es el suyo y en el que le cuesta 'Dios y ayuda' hasta conseguir las tablas. Pero Montilivi es un lugar donde la UDA ha ganado hasta en cinco veces en diez comparecencias y porqué no un sexto día. Y es que dicen que una gota de agua es capaz de perforar una roca, no por su fuerza sino por su constancia. Han pasado ya doce partidos desde que se ganara en Reale Arena al Sanse –diez partidos de Liga en Primera, otro en Segunda el día del ascenso y uno de Copa ante el Arenteiro– y en más de uno ha estado cerca de alcanzar ese objetivo que pueda significar como desatarse la camisa de fuerza. Y a esa insistencia, al cobijo de un buen trabajo regular –no por el baremo calificativo y sí por constancia en el rendimiento–, se agarra para confirmar la llegada del esperado triunfo.

La cita llega tras el lamento que supuso la derrota, segunda consecutiva, tras un partido con 'vaivenes'. Se perdió en Vallecas después de una buena primera parte y se cayó, por cuarta vez esta temporada, en el Power Horse Stadium frente al Betis, tras firmar una segunda parte que contrasta con la primera, donde los errores puntuales pusieron el partido cuesta arriba. Esos tropiezos puntuales conllevan vivir donde, desde el principio, se pensó se estaría, viviendo al límite, pero se ha soñado y merecido, tal vez, estar sin sufrir tanto.

La vuelta de Robertone y Leo Baptistao puede aliviar las heridas por lo que ambos aportan con vistas a un duelo que se atisba difícil, como todos, pero en el que es posible sacar tajada. Puede que no haya equipo en la Liga al que la UDA no le tenga tomada 'cierta medida' como al gerundense, al que se la ganado en Motilivi en cinco de los diez duelos disputados, con dos de los últimos tres jugados. Eso permite pensar que no es un rival tan infalible como pueda parecer de su comportamiento en casa.

Entonces fue con un centro del campo en el que compartían responsabilidad los tres que ahora mismo están disponibles, el citado Robertone, Samú Costa –uno de los mejores si no el mejor el pasado sábado– y César de la Hoz, pese a que son tres los partidos consecutivos que el cántabro no está en el once y esa ausencia puede que se note. Por detrás son fijos Fernando y Sergio Akieme. Las dolencias y los entrenamientos a puerta cerrada llenan de dudas al resto por las lesiones de Alejandro Pozo y Rodrigo Ely. Houboulang Mendes, Kaiky y Chumi tienen opciones, el primero para salir de inicio por la derecha y los otros dos para acompañar a Babic en el centro de la zaga, con más papeletas para el gallego.

Por delante, del centro del campo, Melero es duda para ejercer esa función de enganche, que quita dudas para que los que llevaban el peso del equipo el curso pasado no estén aferrados a la duda sobre su presencia en el once, con Robertone ejerciendo ese papel de hombre vital. Baptistao debe estar en la derecha y Embarba aparecer por la banda izquierda, posiblemente con Luis Suárez como hombre en punta, aunque por jugar los 90 minutos ante el Betis, exhibiendo exigencia desde el primer hasta el último minuto, lo mismo es 'descartado' para el inicio.

Enfrente se las verá con un Girona al que la irregularidad por la que atraviesa le obliga a conquistar los tres puntos de hoy. El técnico albirrojo afronta el duelo con problemas de efectivos, ya que Miguel Gutiérrez está sancionado y la enfermería tiene sitio para Ibrahima Kébé, Valery Fernández, Yan Couto y Yangel Herrera. Lo más normal es que Bernardo y Javi Hernández estén de inicio en defensa, con la presencia de Toni Villa o Riquelme, por la izquierda, con más opciones para el primero.

Tiene el problema que está aguerrido a los indálicos también, el de dejar su puerta a cero. En casa, el cuadro de Míchel solo lo ha conseguido en un partido, mientras que en dos partidos se quedó sin ver portería. Al Girona le ha afectado el parón mundialista, pues solo ha sumado dos victorias, también es cierto que con tres derrotas más –una victoria entre los últimos cuatro partidos– y los empates de las dos primeras citas tras la vuelta. Con dos puntos más que la UDA, la victoria tiene su aquel. Ganar le situaría cerca de la 'treintena' y eso son palabras mayores. Si el que suma es la UDA, esto permitirá mirar al frente con el viento a favor.