La sanción de Hacienda a los autónomos que no guardan o pierden una factura

Pero ¿qué sucede si por descuidos u otros imprevistos, un autónomo perdiera sus facturas? En estos casos Hacienda establece una multa de hasta el 4% de su facturación. La razón es que, sin estos documentos, no se tendrá cómo demostrar ante hacienda la veracidad de sus liquidaciones y declaraciones de IVA o IRPF trimestral. En este orden, el órgano fiscal considera como una falta grave el perder, falsear o no demostrar las facturas correctamente.

En consecuencia, y de acuerdo con el artículo 201 de la Ley General Tributaria, «Cuando el incumplimiento consista en la falta de expedición o en la falta de conservación de facturas, justificantes o documentos sustitutivos. La sanción consistirá en multa pecuniaria proporcional del 2% o 4% del importe del conjunto de las operaciones que hayan originado la infracción». Además, en los casos en que no se conozca el importe de las transacciones involucradas en la infracción, se podrán establecer multas de hasta 300 euros por cada operación.

Por último, es importante aclarar que en cuanto a las facturas que se deben guardar, se contemplan tanto las emitidas como las recibidas. Incluso, en algunos casos también se recomienda guardar los albaranes asociados a las facturas. En cuanto al formato en que deben ser guardadas las facturas, Hacienda advierte que puede ser tanto en formato físico como digital. Lo importante es que sean documentos totalmente auténticos y que permita establecer la legibilidad y veracidad de lo contenido.