Un juzgado abre una causa por atentado, desórdenes y daños por el ataque a la comitiva

Según fuentes de la investigación, en particular se conoce ya la filiación de algunos de los individuos que se centraron en el hostigamiento al presidente del Gobierno y en golpear el vehículo en el que fue evacuado Sánchez, un todoterreno KGM Rexton que resultó dañado y con los cristales rotos. Los operativos han destacado en sus informes que además de este todoterreno negro en el que viajaba el jefe del Ejecutivo, otro vehículo idéntico resultó con importantes destrozos porque los violentos lo confundieron con el que viajaba el presidente.

Y es que Pedro Sánchez, dado el estado de las carreteras debido a la acumulación del fango, no viajó a Paiporta en uno de sus habituales vehículos oficiales (Audi A8 L W12 con un nivel V de blindaje R9, el más alto para modelos civiles) sino con un todoterreno Rexton de la antigua marca coreana SsangYong carente de cualquier protección, por lo que los golpes causaron importantes daños al coche.

Los responsables de la investigación, consultados por este periódico, que han anticipado que muy probablemente se produzcan arrestos en breve, no han querido precisar si los sospechosos identificados por haber tomado parte en los disturbios pertenecen a grupos de ultraderecha o estaban «organizados», tal y como aseguró Fernando Grande-Marlaska este lunes.

Los operativos al mando de las pesquisas aseguran que todavía es pronto para determinar si es cierto que pudieron estar involucrados grupos radicales llegados ex profeso a la zona, ya que aun siguen analizándose las imágenes de los incidentes, particularmente muchas grabaciones y fotografías de redes sociales. En esas plataformas han aparecido imágenes de asistentes con prendas supuestamente con simbología ultra o mensajes de colectivos de ese signo alentando a acudir a Paiporta.

Los investigadores han constatado que en la zona efectivamente había miembros de Yomus Ultras, seguidores radicales del Valencia C.F., o simpatizantes del controvertido eurodiputado Alvise Pérez, pero no consta que se desplazaran de manera organizada para provocar los incidentes. Los primeros -explicaron desde los servicios de Inforamción- llevaban varios días como voluntarios limpiado el lodo, mientras que los segundos habían sido convocados por el conocido agitador para descargar camiones de ayuda gestionados por el parlamentario europeo, presente a esas horas en Paiporta.

En cualquiera caso, los servicios de Información tanto de la Guardia Civil como de la Policía Nacional se han desvinculado totalmente de un informe de 12 páginas apócrifo pero con apariencia de oficial que desde la tarde del mismo domingo circula por diferentes entornos policiales, periodísticos y políticos. En ese documento, tras recoger y analizar diferentes imágenes y mensajes de redes sociales, se concluye que lo ocurrido en Paiporta fue «obra de la extrema derecha y de los grupos ultras que han movilizado su maquinaria para intentar destruir a un Gobierno elegido legítimamente a través de instrumentos que se alejan del marco de la legalidad».